Vio también a una viuda muy pobre que depositaba dos moneditas de poco valor.
Vio también a una viuda muy pobre, que echaba allí dos blancas.
Luego pasó una viuda pobre y echó dos monedas pequeñas.
Vio también a una viuda muy pobre que echaba dos moneditas.
y vio también a una viuda necesitada que echaba allí dos blancas,
Vio también a una pobre viuda que echó dos monedas muy pequeñas,
Y vio también a una viuda pobre, que echaba allí dos blancas.
De pronto vio a una viuda pobre que echó dos moneditas de cobre, cuyo valor equivalía a una cantidad muy pequeña de dinero romano.
Entonces comentó: – En verdad les digo, que esta pobre viuda dio más que todos los demás;