Y dará a luz a un hijo y le pondrás el nombre de “Jesús”, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados.
Lucas 2:21 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Cuando se cumplieron los ocho días y fueron a circuncidarlo, le pusieron por nombre “Jesús”, dado que este fue el nombre que el ángel había indicado antes de que fuera concebido. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por nombre JESÚS, el cual le había sido puesto por el ángel antes que fuese concebido. Biblia Nueva Traducción Viviente Ocho días después, cuando el bebé fue circuncidado, le pusieron por nombre Jesús, el nombre que había dado el ángel aun antes de que el niño fuera concebido. Biblia Católica (Latinoamericana) Cumplidos los ocho días, circuncidaron al niño y le pusieron el nombre de Jesús, nombre que había indicado el ángel antes de que su madre quedara embarazada. La Biblia Textual 3a Edicion Y cuando se cumplieron ocho días para circuncidarlo,° entonces fue llamado su nombre JESÚS; el cual le puso el ángel° antes de que ella quedara encinta.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando se cumplieron ocho días y hubo que circuncidar al niño le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de ser concebido en el seno materno. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, llamaron su nombre JESÚS; como fue llamado por el ángel antes que Él fuese concebido en el vientre. |
Y dará a luz a un hijo y le pondrás el nombre de “Jesús”, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados.
Y José no tuvo relaciones conyugales con María, hasta que dio a luz a su hijo; y le puso por nombre “Jesús”.
Respondió Jesús: – Permíteme ser bautizado, pues es conveniente cumplir con la ley y la justicia; y Juan accedió.
Mira, concebirás en tu vientre y darás a luz a un hijo, y le pondrás por nombre “Jesús”.
A los ocho días de su nacimiento, fueron al templo para circuncidar al niño, y le querían poner como nombre el de Zacarías su padre;
de igual modo se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte y sufrió la muerte más miserable, la crucifixión.