¡Esta gente malvada y adúltera pide una señal milagrosa! Pero solo se le dará la señal de Jonás». Entonces Jesús los dejó y se fue.
Mateo 27:40 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) ―Tú, que destruyes el Templo y en tres días lo reconstruyes, ¡sálvate a ti mismo! Si eres el Hijo de Dios, ¡baja de la cruz! Más versionesBiblia Reina Valera 1960 y diciendo: Tú que derribas el templo, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo; si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz. Biblia Nueva Traducción Viviente «¡Pero mírate ahora! —le gritaban—. Dijiste que ibas a destruir el templo y a reconstruirlo en tres días. Muy bien, si eres el Hijo de Dios, sálvate a ti mismo y bájate de la cruz». Biblia Católica (Latinoamericana) y decían: '¡Vaya! ¡Tú que destruyes el Templo y lo levantas de nuevo en tres días! Si eres el Hijo de Dios, líbrate del suplicio y baja de la cruz. La Biblia Textual 3a Edicion y diciendo: ¡El que derriba el santuario y en tres días lo edifica!° ¡Si eres Hijo de Dios, sálvate a ti mismo y baja de la cruz! Biblia Serafín de Ausejo 1975 y diciendo: 'Tú, que destruyes el templo y en tres días lo reconstruyes: si eres Hijo de Dios sálvate a ti mismo y baja de la cruz'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y diciendo: Tú que derribas el templo, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo. Si eres el Hijo de Dios, desciende de la cruz. |
¡Esta gente malvada y adúltera pide una señal milagrosa! Pero solo se le dará la señal de Jonás». Entonces Jesús los dejó y se fue.
que declararon: ―Este hombre dijo: “Puedo destruir el Templo de Dios y reconstruirlo en tres días”.
De la misma manera se burlaban de él los jefes de los sacerdotes, junto con los maestros de la Ley y los líderes judíos.
―Salvó a otros —decían—, ¡pero no puede salvarse a sí mismo! ¡Y es el rey de Israel! Que baje ahora de la cruz, y así creeremos en él.
Cuando el capitán romano y los que con él estaban custodiando a Jesús vieron el terremoto y todo lo que había sucedido, quedaron aterrados y dijeron: ―¡Verdaderamente este era el Hijo de Dios!
El tentador se le acercó y le propuso: ―Si eres el Hijo de Dios, ordena a estas piedras que se conviertan en pan.
y le dijo: ―Si eres el Hijo de Dios, tírate abajo, porque la Escritura dice: »“Ordenará que sus ángeles te lleven en brazos, para que no tropieces con piedra alguna”».
Abraham le dijo: “Si no les hacen caso a Moisés y a los Profetas, tampoco se convencerán aunque alguien se levante de entre los muertos”».
Los habitantes de la tierra se alegrarán de su muerte. Entonces harán fiesta e intercambiarán regalos, porque estos dos profetas les estaban haciendo la vida imposible.