Tanto la gente que iba delante de él como la que iba detrás gritaba: ―¡Hosanna al Hijo de David! ―¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ―¡Hosanna en las alturas!
Mateo 23:39 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Y les aviso que ya no volverán a verme hasta que digan: “¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!”». Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Porque os digo que desde ahora no me veréis, hasta que digáis: Bendito el que viene en el nombre del Señor. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues te digo lo siguiente: no volverás a verme hasta que digas: “¡Bendiciones al que viene en el nombre del Señor!”». Biblia Católica (Latinoamericana) Y les digo que ya no me volverán a ver hasta que digan: ¡Bendito sea el que viene en nombre del Señor!' La Biblia Textual 3a Edicion Porque os digo que desde ahora en adelante, de ningún modo me veréis hasta que digáis: ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque yo os digo: ya no me veréis más hasta que digáis: ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque os digo que desde ahora no me veréis, hasta que digáis: Bendito el que viene en el nombre del Señor. |
Tanto la gente que iba delante de él como la que iba detrás gritaba: ―¡Hosanna al Hijo de David! ―¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ―¡Hosanna en las alturas!
A sus discípulos les dijo: ―Llegará el tiempo en que ustedes desearán ver aunque sea uno de los días de gloria del Hijo del hombre, pero no podrán.
Dentro de poco, el mundo ya no me verá más, pero ustedes sí me verán. Y, porque yo vivo, también ustedes vivirán.
Jesús le contestó: ―¡Pero, Felipe! ¿Tanto tiempo llevo ya entre ustedes y todavía no me conoces? El que me ha visto a mí ha visto al Padre. ¿Cómo puedes decirme: “Muéstranos al Padre”?
De nuevo Jesús les dijo: ―Yo me voy, y ustedes me buscarán, pero en su pecado morirán. Adonde yo voy, ustedes no pueden ir.
Por eso les he dicho que morirán en sus pecados. Si no creen que yo soy el que afirmo ser, en sus pecados morirán.
Abraham, el padre de ustedes, se regocijó al pensar que vería mi día. Y lo vio y se alegró.
Hermanos en la fe, quiero que entiendan este misterio, para que no se vuelvan orgullosos. Una parte del pueblo de Israel no quiere creer, y así seguirá hasta que todos los no judíos que crean pasen a formar parte del pueblo de Dios.