Miren que les escribo ahora de mi puño y letra, ¡y con letras bien grandes!
Mirad con cuán grandes letras os escribo de mi propia mano.
Fíjense que uso letras grandes para escribirles de mi propio puño y letra estas últimas palabras.
Miren qué letras tan grandes estoy trazando: ésta es mi letra.
¡Mirad con cuán grandes letras os escribo con mi mano!
Ved con qué letras tan grandes os escribo de mi puño y letra.
Mirad cuán grandes letras os he escrito con mi propia mano.
Yo, Tercio, que escribo esta carta de parte de Pablo, los saludo pues también he creído en el Señor.