»Trata de igual manera al extranjero que no pertenece a tu pueblo Israel, pero que atraído por tu fama ha venido de lejanas tierras.
Números 15:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 así que la misma ley y la misma ordenanza regirán, tanto para ustedes como para el extranjero que viva entre ustedes». Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Una misma ley y un mismo decreto tendréis, vosotros y el extranjero que con vosotros mora. Biblia Nueva Traducción Viviente Las mismas instrucciones y ordenanzas se aplicarán tanto a ustedes como a los extranjeros que vivan entre ustedes». Biblia Católica (Latinoamericana) Habrá sólo una ley y una norma tanto para ustedes como para el extranjero que vive con ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion Una sola ley y un solo decreto tendréis para vosotros y para el extranjero que habita con vosotros.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Una misma ley y un mismo derecho tendréis vosotros y el extranjero que mora con vosotros'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Una misma ley y un mismo derecho tendréis, vosotros y el extranjero que mora con vosotros. |
»Trata de igual manera al extranjero que no pertenece a tu pueblo Israel, pero que atraído por tu fama ha venido de lejanas tierras.
»La misma ley se aplicará al nativo y al extranjero que viva entre ustedes».
Una sola ley regirá, tanto para el nativo como para el extranjero. Yo soy el Señor su Dios».
»Si el que peca involuntariamente es alguien del pueblo, e incurre en algo que los mandamientos del Señor prohíben, será culpable.
Estas seis ciudades servirán de refugio a los israelitas y a los extranjeros, sean estos residentes o solo estén de paso. Cualquiera que involuntariamente dé muerte a alguien podrá refugiarse en estas ciudades.
»Si el extranjero que vive entre ustedes quiere celebrar la Pascua del Señor, deberá hacerlo ciñéndose a sus estatutos y leyes. Los mismos estatutos se aplicarán tanto a nativos como a extranjeros».
Todos los israelitas con sus jefes, oficiales y jueces estaban de pie a ambos lados del arca del pacto, frente a los sacerdotes levitas que la cargaban en hombros. Tanto los israelitas como los extranjeros residentes tomaron sus posiciones, la mitad de ellos hacia el monte Guerizín y la otra mitad hacia el monte Ebal, tal como Moisés, siervo del Señor, había mandado cuando bendijo por primera vez al pueblo de Israel.