No deberán comerla cruda ni hervida, sino asada al fuego, junto con la cabeza, las patas y los intestinos.
Levítico 3:14 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 El oferente presentará al Señor, como ofrenda puesta al fuego, las siguientes partes del animal: la grasa que recubre los intestinos y la que se adhiere a estos, Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Después ofrecerá de ella su ofrenda encendida a Jehová; la grosura que cubre los intestinos, y toda la grosura que está sobre las entrañas, Biblia Nueva Traducción Viviente El sacerdote presentará parte de esta ofrenda como una ofrenda especial al Señor. Esto incluye toda la grasa que rodea las vísceras, Biblia Católica (Latinoamericana) Presentará parte de ella como sacrificio por el fuego para Yavé: La Biblia Textual 3a Edicion y de ella, presentará su ofrenda ígnea ante YHVH: la grasa que cubre las entrañas y toda la grasa que hay sobre las entrañas, Biblia Serafín de Ausejo 1975 De su ofrenda presentará, como manjar pasado por el fuego en honor de Yahveh, la grasa que cubre los intestinos y toda la que envuelve las entrañas, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Después ofrecerá de ella su ofrenda encendida a Jehová; la grosura que cubre los intestinos, y toda la grosura que está sobre las entrañas, |
No deberán comerla cruda ni hervida, sino asada al fuego, junto con la cabeza, las patas y los intestinos.
¿Por qué tuve que salir del vientre solo para ver problemas y aflicción y para terminar mis días en vergüenza?
poniendo la mano sobre la cabeza del animal, al que degollará ante la Tienda de reunión. Luego los hijos de Aarón derramarán la sangre alrededor del altar.
los dos riñones y la grasa que los recubre, la grasa que recubre los lomos, y también el lóbulo del hígado, el cual se extraerá junto con los riñones.
Luego, sacará al animal toda la grasa, tal y como se saca la grasa al sacrificio de comunión, y el sacerdote la quemará toda en el altar como aroma grato al Señor. Así el sacerdote pedirá perdón por él, y su pecado será perdonado.
—“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente” —respondió Jesús—.
«Es tal la angustia que me invade que me siento morir —dijo—. Quédense aquí y manténganse despiertos conmigo».