Acéptame el regalo que te he traído. Dios ha sido muy bueno conmigo y tengo más de lo que necesito. Fue tanta la insistencia de Jacob que, finalmente, Esaú aceptó.
Jueces 1:15 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 —Concédeme un gran favor —respondió ella—. Ya que me has dado tierras en el Néguev, dame también manantiales. Fue así como Caleb dio a su hija manantiales en las zonas altas y en las bajas. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Ella entonces le respondió: Concédeme un don; puesto que me has dado tierra del Neguev, dame también fuentes de aguas. Entonces Caleb le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo. Biblia Nueva Traducción Viviente Ella contestó: —Concédeme otro obsequio. Ya me regalaste tierras en el Neguev; ahora te ruego que también me des manantiales. Entonces Caleb le entregó tanto los manantiales de la parte alta como los de la parte baja. Biblia Católica (Latinoamericana) Respondió: 'Hazme un favor; ya que me enviaste a esta zona del Negueb, dame al menos manantiales'. Caleb le dio pues las Fuentes de Arriba y las Fuentes de Abajo. La Biblia Textual 3a Edicion Y le respondió: Dame una bendición; ya que me has dado tierra de sequedales,° dame manantiales de agua. Y Caleb le dio los manantiales de arriba y los manantiales de abajo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ella le replicó: 'Concédeme un favor: ya que me has dado tierra en el Negueb, dame también fuentes de agua'. Y Caleb le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ella entonces le respondió: Dame una bendición; puesto que me has dado tierra de sequedal, dame también fuentes de aguas. Entonces Caleb le dio las fuentes de arriba, y las fuentes de abajo. |
Acéptame el regalo que te he traído. Dios ha sido muy bueno conmigo y tengo más de lo que necesito. Fue tanta la insistencia de Jacob que, finalmente, Esaú aceptó.
Así que me pareció necesario rogar a estos hermanos que se adelantaran a visitarlos y completaran los preparativos para esa ofrenda generosa que ustedes habían prometido. Entonces estará lista como un acto de generosidad y no como una imposición nuestra.
Cuando la tierra bebe la lluvia que con frecuencia cae sobre ella y produce una buena cosecha para los que la cultivan, recibe bendición de Dios.
—Concédeme un gran favor —respondió ella—. Ya que me has dado tierras en el Néguev, dame también manantiales. Fue así como Caleb dio a su hija manantiales en las zonas altas y en las bajas.
No devuelvan mal por mal ni insulto por insulto; más bien, bendigan, porque para esto fueron llamados, para heredar una bendición.
Cuando ella llegó, convenció a Otoniel de que pidiera un terreno a su padre. Al bajar Acsa del asno, Caleb preguntó: —¿Qué te pasa?
Los descendientes de Hobab el quenita, suegro de Moisés, acompañaron a la tribu de Judá desde la Ciudad de las Palmeras hasta el desierto de Judá, que está en el Néguev, cerca de Arad. Allí habitaron con la gente del lugar.
Sin perder tiempo, Abigaíl reunió doscientos panes, dos odres de vino, cinco ovejas asadas, cinco seahs de trigo tostado, cien tortas de uvas pasas y doscientas tortas de higos. Después de cargarlo todo sobre unos asnos,
Acepte usted este regalo que su criada ha traído y repártalo entre los criados que lo acompañan.