¡El Señor vive! ¡Alabada sea mi Roca! ¡Exaltado sea el Dios de mi salvación!
Juan 6:57 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Así como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, también el que come de mí vivirá por mí. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí. Biblia Nueva Traducción Viviente Yo vivo gracias al Padre viviente que me envió; de igual manera, todo el que se alimente de mí vivirá gracias a mí. Biblia Católica (Latinoamericana) Como el Padre, que es vida, me envió y yo vivo por el Padre, así quien me come vivirá por mí. La Biblia Textual 3a Edicion Como me envió el Padre viviente, y Yo vivo del Padre, de igual modo el que me mastica, también él vivirá de mí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Lo mismo que el Padre que me ha enviado vive, y yo vivo por el Padre, así también el que me come vivirá por mí. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, así el que me come, él también vivirá por mí. |
¡El Señor vive! ¡Alabada sea mi Roca! ¡Exaltado sea el Dios de mi salvación!
Pero el Señor es el Dios verdadero, el Dios viviente, el Rey eterno. Cuando se enoja, tiembla la tierra; las naciones no pueden soportar su ira.
Dentro de poco el mundo ya no me verá más, pero ustedes sí me verán. Y porque yo vivo, también ustedes vivirán.
—Yo soy el camino, la verdad y la vida —contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí.
para que todos sean uno. Padre, así como tú estás en mí y yo en ti, permite que ellos también estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado.
Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él.
Porque así como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha concedido al Hijo el tener vida en sí mismo,
—Esto es lo que Dios quiere que hagan: que crean en aquel a quien él envió —respondió Jesús.
Porque he bajado del cielo no para hacer mi voluntad, sino la del que me envió.
Así está escrito: «El primer hombre, Adán, se convirtió en un ser viviente»; el último Adán, en el Espíritu que da vida.
Es cierto que fue crucificado en debilidad, pero ahora vive por el poder de Dios. De igual manera, nosotros participamos de su debilidad, pero por el poder de Dios viviremos con Cristo para ustedes.
He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí.
Porque todos ellos cuentan de lo bien que ustedes nos recibieron y cómo se convirtieron a Dios. Dejaron los ídolos para servir al Dios vivo y verdadero,
Si esto es así, ¡cuánto más la sangre de Cristo, quien por medio del Espíritu eterno se ofreció sin mancha a Dios, purificará nuestra conciencia de las obras que conducen a la muerte, a fin de que sirvamos al Dios viviente!
Así manifestó Dios su amor entre nosotros: en que envió a su Hijo único al mundo para que vivamos por medio de él.