Éxodo 16:12 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 «Han llegado a mis oídos las murmuraciones de los israelitas. Diles que antes de que caiga la noche comerán carne, y que mañana por la mañana se hartarán de pan. Así sabrán que yo soy el Señor su Dios». Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Yo he oído las murmuraciones de los hijos de Israel; háblales, diciendo: Al caer la tarde comeréis carne, y por la mañana os saciaréis de pan, y sabréis que yo soy Jehová vuestro Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente «He oído las quejas de los israelitas. Ahora diles: “Por la tarde tendrán carne para comer, y por la mañana tendrán todo el pan que deseen. Así ustedes sabrán que yo soy el Señor su Dios”». Biblia Católica (Latinoamericana) He oído las quejas de mi pueblo. Diles: por la tarde comerán carne y por la mañana se saciarán de pan; así sabrán que yo soy Yavé, el Dios de ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion Yo he oído las murmuraciones de los hijos de Israel. Háblales, diciendo: Al atardecer comeréis carne, y por la mañana os hartaréis de pan. Entonces sabréis que Yo soy YHVH, vuestro Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'He escuchado las murmuraciones de los israelitas. Háblales y diles: 'Al atardecer comeréis carne, y por la mañana os saciaréis de pan, y sabréis que yo soy Yahveh, vuestro Dios''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Yo he oído las murmuraciones de los hijos de Israel; háblales, diciendo: Entre las dos tardes comeréis carne, y por la mañana os saciaréis de pan, y sabréis que yo soy Jehová vuestro Dios. |
El hombre de Dios se presentó ante el rey de Israel y le dijo: «Así dice el Señor: “Por cuanto los arameos piensan que el Señor es un dios de las montañas y no un dios de los valles, yo te voy a entregar este enorme ejército en tus manos, y así sabrás que yo soy el Señor”».
Pidió el pueblo comida y les envió codornices; los sació con pan del cielo.
al que cuidarán hasta el catorce del mes, día en que la comunidad de Israel en pleno lo sacrificará al caer la noche.
—Esto es para que crean que yo el Señor, el Dios de sus antepasados, Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, me he aparecido a ti.
Haré de ustedes mi pueblo y yo seré su Dios. Así sabrán que yo soy el Señor su Dios, que los libró de la opresión de los egipcios.
el Señor dice: ‘¡Ahora vas a saber que yo soy el Señor!’. Con esta vara que llevo en la mano voy a golpear las aguas del Nilo y el río se convertirá en sangre.
Allí habitarán juntos Judá y todas sus ciudades, los agricultores y los pastores de rebaños.
Entonces sabrán que yo, el Señor su Dios, estoy con ellos y que ellos, el pueblo de Israel, son mi pueblo. Yo, el Señor y Dios, lo afirmo.
Me has desafiado con arrogancia y has multiplicado tus palabras contra mí; yo te he escuchado.
Desde ese día en adelante, los israelitas sabrán que yo soy el Señor su Dios.
«Entonces ustedes sabrán que yo, el Señor su Dios, habito en Sión, mi monte santo. Santa será Jerusalén, y nunca más la invadirán los extranjeros.
Yo soy el Señor su Dios, así que conságrense y manténganse santos, porque yo soy santo. No se hagan impuros por causa de los animales que se arrastran.
Pero a esa parte restante la pasaré por el fuego; la refinaré como se refina la plata, la probaré como se prueba el oro. Entonces ellos me invocarán y yo responderé. Yo diré: “Ellos son mi pueblo”. Ellos dirán: “El Señor es nuestro Dios”.
Gente de toda clase se había mezclado con los israelitas. Esa gente solo pensaba en comer. Y también los israelitas volvieron a llorar y dijeron: «¡Quién nos diera carne!
—¿Hasta cuándo ha de murmurar contra mí esta perversa comunidad? Ya he escuchado cómo se quejan contra mí los israelitas.