José ya no pudo controlarse delante de sus servidores, así que ordenó: «¡Que salgan todos de mi presencia!». Y ninguno de ellos quedó con él. Cuando se dio a conocer a sus hermanos,
2 Samuel 13:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Luego tomó la sartén para servirle, pero Amnón se negó a comer y ordenó: —¡Fuera de aquí todos! Una vez que todos salieron, Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Tomó luego la sartén, y las sacó delante de él; mas él no quiso comer. Y dijo Amnón: Echad fuera de aquí a todos. Y todos salieron de allí. Biblia Nueva Traducción Viviente pero cuando ella le llevó la bandeja, Amnón se negó a comer y les dijo a sus sirvientes: «Salgan todos de aquí». Así que todos salieron. Biblia Católica (Latinoamericana) Tomó después la sartén y la vació delante de él, pero no quiso comer. Amnón dijo entonces: 'Manden a todos afuera', y salieron todos. La Biblia Textual 3a Edicion Luego las sacó de la sartén delante de él, pero él rehusó comer. Y Amnón ordenó: ¡Salid todos de mi presencia! Cuando todos salieron de su presencia, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tomó luego la sartén y la vació delante de él; pero él no quiso comer. Amnón dijo entonces: 'Que salgan todos de aquí'; y salieron todos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tomó luego la sartén, y las sacó delante de él; mas él no quiso comer. Y dijo Amnón: Echad fuera de aquí a todos. Y todos salieron de allí. |
José ya no pudo controlarse delante de sus servidores, así que ordenó: «¡Que salgan todos de mi presencia!». Y ninguno de ellos quedó con él. Cuando se dio a conocer a sus hermanos,
Amnón dijo a Tamar: —Trae la comida a mi habitación y dame de comer tú misma. Ella tomó las tortas que había preparado y se las llevó a su hermano Amnón a la habitación,
Tamar fue a casa de su hermano Amnón y lo encontró acostado. Tomó harina, la amasó, preparó las tortas allí mismo y las coció.
Pues todo el que hace lo malo aborrece la luz y no se acerca a ella por temor a que sus obras queden al descubierto.
Pero luego se regresó desde las imágenes de piedra que estaban cerca de Guilgal y dijo: —Majestad, tengo un mensaje secreto para usted. —¡Silencio! —ordenó el rey. Y todos sus servidores se retiraron de su presencia.