Cuando hagáis la recolección de vuestras tierras no segaréis hasta la misma orilla del campo. No recogerás las espigas caídas,
Jueces 8:2 - Biblia Martin Nieto Él les respondió: '¿Qué he hecho yo en comparación con vosotros? ¿Acaso no ha sido mejor el rebusco de Efraín que la vendimia de Abiezer? Más versionesBiblia Reina Valera 1960 A los cuales él respondió: ¿Qué he hecho yo ahora comparado con vosotros? ¿No es el rebusco de Efraín mejor que la vendimia de Abiezer? Biblia Nueva Traducción Viviente Pero Gedeón les contestó: —¿Qué he logrado yo comparado con lo que han hecho ustedes? ¿Acaso los racimos olvidados de la cosecha de Efraín no son mucho mejores que todos los cultivos de mi pequeño clan de Abiezer? Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Gedeón les respondió: 'Toda la vendimia de Abiezer no vale lo que Efraín rebuscó detrás de él. La Biblia Textual 3a Edicion Pero él les dijo: ¿Qué he hecho yo en comparación con vosotros? ¿Acaso no son mejores los rebuscos de Efraín que la vendimia de Abiezer? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero él les replicó: '¿Qué he hecho yo hasta ahora en comparación con vosotros? ¿Es que no son mejores los rebuscos de Efraín que la vendimia de Abiezer? Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y él les respondió: ¿Qué he hecho yo ahora en comparación con vosotros? ¿No es el rebusco de Efraín mejor que la vendimia de Abiezer? |
Cuando hagáis la recolección de vuestras tierras no segaréis hasta la misma orilla del campo. No recogerás las espigas caídas,
Éstos son los hijos de Galaad: de Yéser, el clan yeserita; de Jélec, el clan jelequita;
El ángel del Señor vino y se sentó bajo la encina de Ofrá, que pertenecía a Joás, de Abiezer. Gedeón, su hijo, estaba limpiando el trigo en el lagar para ocultarlo a Madián.
Entonces el espíritu del Señor se apoderó de Gedeón, tocó la trompeta, y Abiezer le siguió.
Los de la tribu de Efraín dijeron a Gedeón: '¿Qué manera es ésta de obrar con nosotros? ¿Cómo no nos has convocado cuando ibas a luchar contra los madianitas?'. Y se querellaron fuertemente contra él.
El Señor puso en vuestras manos a los jefes madianitas, Oreb y Zeb. Lo que yo he hecho, ¿puede compararse con lo que habéis hecho vosotros?'. Ante estas palabras, ellos se calmaron.