Apocalipsis 4:11 - Biblia Reina Valera 1909 Señor, digno eres de recibir gloria y honra y virtud: porque tú criaste todas las cosas, y por tu voluntad tienen ser y fueron criadas. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas. Biblia Nueva Traducción Viviente «Tú eres digno, oh Señor nuestro Dios, de recibir gloria y honor y poder. Pues tú creaste todas las cosas, y existen porque tú las creaste según tu voluntad». Biblia Católica (Latinoamericana) Vuelvan a ti, Señor y Dios nuestro
la gloria, el honor y el poder, pues tú lo mereces.
Tú creaste todas las cosas,
y por tu voluntad existen y fueron creadas. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Digno eres, oh Señor y Dios nuestro,° de recibir la gloria y el honor y el poder, porque Tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existieron y fueron creadas! Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Digno eres, Señor y Dios nuestro, de recibir la gloria, el honor y el poder. Porque tú creaste todas las cosas, por tu voluntad existen y fueron creadas'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu placer existen y fueron creadas. |
Y dijeron los Levitas, Jesuá y Cadmiel, Bani, Hosabnías, Serebías, Odaías, Sebanías y Pethaía: Levantaos, bendecid á Jehová vuestro Dios desde el siglo hasta el siglo: y bendigan el nombre tuyo, glorioso y alto sobre toda bendición y alabanza.
Atribuid fortaleza á Dios: Sobre Israel es su magnificencia, Y su poder está en los cielos.
Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, la mar y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día: por tanto Jehová bendijo el día del reposo y lo santificó.
Todas las cosas ha hecho Jehová por sí mismo, Y aun al impío para el día malo.
Levantad en alto vuestros ojos, y mirad quién crió estas cosas: él saca por cuenta su ejército: a todas llama por sus nombres; ninguna faltará: tal es la grandeza de su fuerza, y su poder y virtud.
¿No has sabido, no has oído que el Dios del siglo es Jehová, el cual crió los términos de la tierra? No se trabaja, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance.
Les diréis así: Los dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, perezcan de la tierra y de debajo de estos cielos.
¡Oh Señor Jehová! he aquí que tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, y con tu brazo extendido, ni hay nada que sea difícil para ti:
Y diciendo: Varones, ¿por qué hacéis esto? Nosotros también somos hombres semejantes á vosotros, que os anunciamos que de estas vanidades os convirtáis al Dios vivo, que hizo el cielo y la tierra, y la mar, y todo lo que está en ellos:
El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, éste, como sea Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos de manos,
Porque de él, y por él, y en él, son todas las cosas. A él sea gloria por siglos. Amén.
Y de aclarar á todos cuál sea la dispensación del misterio escondido desde los siglos en Dios, que crió todas las cosas.
El es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud: Dios de verdad, y ninguna iniquidad en él: Es justo y recto.
Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra; Y los cielos son obras de tus manos:
En estos porstreros días nos ha hablado por el Hijo, al cual constituyó heredero de todo, por el cual asimismo hizo el universo:
Y nos ha hecho reyes y sacerdotes para Dios y su Padre; á él sea gloria é imperio para siempre jamás. Amén.
Y juró por el que vive para siempre jamás, que ha criado el cielo y las cosas que están en él, y la tierra y las cosas que están en ella, y el mar y las cosas que están en él, que el tiempo no será más.
Diciendo en alta voz: Temed á Dios, y dadle honra; porque la hora de su juicio es venida; y adorad á aquel que ha hecho el cielo y la tierra y el mar y las fuentes de las aguas.
DESPUÉS de estas cosas oí una gran voz de gran compañía en el cielo, que decía: Aleluya: Salvación y honra y gloria y potencia al Señor Dios nuestro.
Que decían en alta voz: El Cordero que fué inmolado es digno de tomar el poder y riquezas y sabiduría, y fortaleza y honra y gloria y alabanza.
Y vi un fuerte ángel predicando en alta voz: ¿Quién es digno de abrir el libro, y de desatar sus sellos?
Y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro, y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y nos has redimido para Dios con tu sangre, de todo linaje y lengua y pueblo y nación;