Aniquilaron a los pocos amalecitas que habían sobrevivido y viven allí desde entonces.
Deuteronomio 25:19 - Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo tanto, cuando el Señor tu Dios te haya dado descanso de todos tus enemigos en la tierra que te da como preciada posesión, destruirás a los amalecitas y borrarás su memoria de la faz de la tierra. ¡No lo olvides nunca! Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, cuando Jehová tu Dios te dé descanso de todos tus enemigos alrededor, en la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad para que la poseas, borrarás la memoria de Amalec de debajo del cielo; no lo olvides. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso, cuando Yavé, tu Dios, después de someter a todos tus enemigos alrededor, te dé descanso en la tierra que él te da, borrarás el recuerdo de Amalec de debajo de los cielos. No lo olvides. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, cuando YHVH tu Dios te haya dado descanso de todos tus enemigos alrededor, en la tierra que YHVH tu Dios te da por heredad para que la poseas, borrarás la memoria de Amalec debajo de los cielos. No lo olvides.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando Yahveh, tu Dios, te haya dado reposo, al abrigo de todos tus enemigos de alrededor, en la tierra que Yahveh, tu Dios, te va a dar en herencia para que la poseas, borrarás el recuerdo de Amalec de debajo del cielo. ¡No lo olvides! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Será pues, cuando Jehová tu Dios te hubiere dado reposo de tus enemigos alrededor, en la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad para que la poseas, que borrarás la memoria de Amalec de debajo del cielo: no lo olvides. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Por lo tanto, recuerden esto: Cuando ya estén ustedes en su país, y hayan acabado con los enemigos de alrededor, deberán destruir a todos los descendientes de Amalec». |
Aniquilaron a los pocos amalecitas que habían sobrevivido y viven allí desde entonces.
Tiempo después, el rey Jerjes ascendió a Amán, hijo de Hamedata el agagueo, lo puso por encima de todos los demás nobles y lo convirtió en el funcionario más poderoso del imperio.
Entonces atravesaron a Amán con el poste que había levantado para Mardoqueo, y la furia del rey se calmó.
Después de la victoria, el Señor dio a Moisés las siguientes instrucciones: «Escribe esto en un rollo para que sea un recuerdo perpetuo, y léelo en voz alta a Josué: “Yo borraré por completo la memoria de Amalec de debajo del cielo”».
Dijo: «Por cuanto han levantado su puño contra el trono del Señor, ahora el Señor estará en guerra con Amalec de generación en generación».
El Señor le respondió: —Yo mismo iré contigo, Moisés, y te daré descanso; todo te saldrá bien.
porque aún no has llegado al lugar de descanso, a la tierra que el Señor tu Dios te da como preciada posesión.
el cuerpo no debe quedar allí colgado toda la noche. Habrá que enterrarlo ese mismo día, porque todo el que es colgado es maldito a los ojos de Dios. De esa manera, evitarás que se contamine la tierra que el Señor tu Dios te da como preciada posesión.
»Cuando entres en la tierra que el Señor tu Dios te da como preciada posesión y la conquistes y te establezcas en ella,
»En aquel tiempo, les di la siguiente orden a las tribus que iban a vivir al oriente del Jordán: “Por más que el Señor su Dios les haya dado esta tierra como propiedad, todos sus hombres de guerra deberán cruzar el Jordán delante de sus hermanos israelitas, armados y listos para ayudarlos;
Quítate del medio, para que lo destruya y borre su nombre de la faz de la tierra. Luego haré una nación poderosa con tus descendientes, una nación más fuerte y numerosa que esta gente”.
Así que Josué tomó control de todo el territorio, tal como el Señor le había indicado a Moisés. Le dio la tierra al pueblo de Israel como su preciada posesión y repartió el territorio entre las tribus. Entonces por fin la tierra descansó de la guerra.
Pasaron los años, y el Señor le había dado al pueblo de Israel descanso de todos sus enemigos. Josué, quien ya era muy viejo,
Tú y tus hombres de guerra marcharán alrededor de la ciudad una vez al día durante seis días.
Por esa razón, los israelitas huyen derrotados de sus enemigos. Ahora Israel mismo será apartado para destrucción. No seguiré más con ustedes a menos que destruyan esas cosas que guardaron y que estaban destinadas para ser destruidas.
Realizó grandes proezas y conquistó a los amalecitas y así salvó a Israel de todos aquellos que lo habían saqueado.
David y sus hombres pasaban su tiempo asaltando a los gesureos, a los gerzitas y a los amalecitas, pueblos que desde los tiempos antiguos vivían cerca de Shur, hacia la tierra de Egipto.