Se levantó, pues , y comió y bebió; y caminó con la fortaleza de aquella comida cuarenta días y cuarenta noches, hasta el monte de Dios, Horeb.
Mateo 4:2 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y habiendo ayunado cuarenta días y cuarenta noches, después tuvo hambre. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. Biblia Nueva Traducción Viviente Durante cuarenta días y cuarenta noches ayunó y después tuvo mucha hambre. Biblia Católica (Latinoamericana) y después de estar sin comer cuarenta días y cuarenta noches, al final sintió hambre. La Biblia Textual 3a Edicion Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y después de ayunar cuarenta días y cuarenta noches, al fin tuvo hambre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y después que hubo ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. |
Se levantó, pues , y comió y bebió; y caminó con la fortaleza de aquella comida cuarenta días y cuarenta noches, hasta el monte de Dios, Horeb.
Y entró Moisés en medio de la nube, y subió al monte; y estuvo Moisés en el monte cuarenta días y cuarenta noches.
Y él estuvo allí con el SEÑOR cuarenta días y cuarenta noches; no comió pan, ni bebió agua; y escribió en tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos.
Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui huésped, y me recogisteis;
porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber;
por cuarenta días, y era tentado del diablo. Y no comió nada en aquellos días; los cuales pasados, después tuvo hambre.
Y estaba allí la fuente de Jacob. Pues Jesús, cansado del camino, así se sentó a la fuente. Era como la hora sexta.
Profeta les despertaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare.
Y me postré delante del SEÑOR, como antes, cuarenta días y cuarenta noches; no comí pan ni bebí agua, a causa de todo vuestro pecado que habíais cometido haciendo mal en ojos del SEÑOR para enojarlo.
Y me postré delante del SEÑOR cuarenta días y cuarenta noches, como estuve postrado antes ; porque el SEÑOR dijo que os había de destruir.
Cuando yo subí al monte para recibir las tablas de piedra, las tablas del pacto que el SEÑOR hizo con vosotros, estuve entonces en el monte cuarenta días y cuarenta noches, sin comer pan ni beber agua;