Lucas 10:13 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras ¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Que si en Tiro y en Sidón hubieran sido hechas las virtudes que se han hecho en vosotras, hace ya días que, sentados en cilicio y ceniza, se habrían arrepentido. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 ¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! que si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que se han hecho en vosotras, tiempo ha que sentadas en cilicio y ceniza, se habrían arrepentido. Biblia Nueva Traducción Viviente »¡Qué aflicción les espera, Corazín y Betsaida! Pues, si en las perversas ciudades de Tiro y de Sidón se hubieran hecho los milagros que hice entre ustedes, hace tiempo sus habitantes se habrían arrepentido de sus pecados vistiéndose de tela áspera y echándose ceniza sobre la cabeza en señal de remordimiento. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Pobre de ti, Corazaín! ¡Pobre de ti, Betsaida! Porque si los milagros que se han hecho en ustedes se hubieran realizado en Tiro y Sidón, hace mucho tiempo que sus habitantes habrían hecho penitencia, poniéndose vestidos de penitencia, y se habrían sentado en la ceniza. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón° se hubieran hecho los milagros° que se hicieron en vosotras, haría tiempo que, sentadas en cilicio y ceniza, se hubieran arrepentido. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Ay de ti, Corazaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran realizado los mismos milagros que en vosotras, ya hace tiempo que, sentados, cubiertos de cilicio y ceniza, se habrían convertido. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! que si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho las maravillas que se han hecho en vosotras, hace mucho tiempo que sentadas en cilicio y ceniza, se habrían arrepentido. |
A ordenar en Sion a los enlutados, para darles gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar del luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío del SEÑOR, para gloria suya.
Y aconteció en el undécimo año, en el primero del mes, que vino Palabra del SEÑOR a mí, diciendo:
Y volví mi rostro al Señor Dios, buscándole en oración y ruego, en ayuno, y cilicio, y ceniza.
Así dijo el SEÑOR: Por tres pecados de Tiro, y por el cuarto, no la convertiré; porque entregaron la cautividad entera a Edom, y no se acordaron del concierto de hermanos.
Y daré a mis dos testigos, y ellos profetizarán por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio.