Entonces vienen a Jericó; y saliendo él de Jericó y sus discípulos y una gran multitud, Bartimeo el ciego, hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino mendigando.
Juan 9:8 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Entonces los vecinos, y los que antes le habían visto que era ciego, decían: ¿no es éste el que se sentaba y mendigaba? Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entonces los vecinos, y los que antes le habían visto que era ciego, decían: ¿No es este el que se sentaba y mendigaba? Biblia Nueva Traducción Viviente Sus vecinos y otros que lo conocían como un pordiosero ciego se preguntaban: «¿No es ese el hombre que solía sentarse a mendigar?». Biblia Católica (Latinoamericana) Sus vecinos y los que lo habían visto pidiendo limosna, decían: '¿No es éste el que se sentaba aquí y pedía limosna?' La Biblia Textual 3a Edicion Entonces los vecinos y los que antes lo veían como mendigo,° decían: ¿No es éste el que se sentaba y mendigaba? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los vecinos y los que de antes lo conocían, pues era un mendigo, decían: '¿No es éste el que estaba sentado pidiendo limosna?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces los vecinos, y los que antes le habían visto que era ciego, decían: ¿No es este el que se sentaba y mendigaba? |
Entonces vienen a Jericó; y saliendo él de Jericó y sus discípulos y una gran multitud, Bartimeo el ciego, hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino mendigando.
Y oyeron los vecinos y los parientes que Dios había hecho con ella grande misericordia, y se alegraron con ella.
Y aconteció que acercándose él a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando;
Anduvieron pues ellas dos hasta que llegaron a Belén; y aconteció que entrando en Belén, toda la ciudad se conmovió por razón de ellas, y decían: ¿No es ésta Noemí?
El levanta del polvo al pobre, y al menesteroso ensalza del estiércol, para asentarlo con los príncipes; y hace que tengan por heredad asiento de honra. Porque del SEÑOR son las columnas de la tierra, y él asentó sobre ellas el mundo.
Y los siervos de Aquis le dijeron: ¿No es éste David, el rey de la tierra? ¿No es éste a quien cantaban en los corros, diciendo: Hirió Saúl sus miles, y David sus diez miles?