Juan 16:25 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Estas cosas os he hablado en proverbios; la hora viene cuando ya no os hablaré por proverbios, pero claramente os anunciaré de mi Padre. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Estas cosas os he hablado en alegorías; la hora viene cuando ya no os hablaré por alegorías, sino que claramente os anunciaré acerca del Padre. Biblia Nueva Traducción Viviente »He hablado de estos asuntos en lenguaje figurativo, pero pronto dejaré de hablar en sentido figurado y les contaré acerca del Padre con toda claridad. Biblia Católica (Latinoamericana) Hasta ahora los he instruido por medio de comparaciones. Pero está llegando la hora en que ya no los instruiré con comparaciones, sino que les hablaré claramente del Padre. La Biblia Textual 3a Edicion Estas cosas os he hablado en alegorías; llega una hora en que ya no os hablaré en alegorías, sino claramente os anunciaré acerca del Padre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Os he dicho todas estas cosas por medio de figuras. Llega la hora en que ya no os hablaré por medio de figuras, sino que os explicaré lo relativo al Padre con toda claridad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Estas cosas os he hablado en proverbios; pero la hora viene cuando ya no os hablaré en proverbios, sino que claramente os hablaré del Padre. |
Y les dijo: ¿No sabéis esta parábola? ¿Cómo, pues, entenderéis todas las parábolas?
Sin parábola no les hablaba; pero a sus discípulos en particular declaraba todo.
Y claramente decía esta palabra. Entonces Pedro le tomó, y le comenzó a reprender.
Y le rodearon los judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo quitas nuestra alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente.
Esta parábola les dijo Jesús; mas ellos no entendieron qué era lo que les decía.
Os echarán de las sinagogas; y aun viene la hora, cuando cualquiera que os matare, pensará que hace servicio a Dios.
He aquí, la hora viene, y ya es venida, que seréis esparcidos cada uno por su cabo, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo.
antes quitamos de nosotros todo escondrijo de vergüenza, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino en manifestación de la verdad, encomendándonos a nosotros mismos a toda conciencia humana delante de Dios.