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2 Corintios 1:10 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

el cual nos libró, y libra de tanta muerte; en el cual esperamos que aun nos librará;

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Biblia Reina Valera 1960

el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Efectivamente él nos rescató del peligro mortal y volverá a hacerlo de nuevo. Hemos depositado nuestra confianza en Dios, y él seguirá rescatándonos,

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Biblia Católica (Latinoamericana)

El nos libró de ese peligro de muerte tan grande, y nos seguirá protegiendo. En él hemos puesto nuestra esperanza y seguirá amparándonos,

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La Biblia Textual 3a Edicion

el cual nos libró de tan gran muerte, y nos librará;° en quien hemos esperado, y aún nos librará;

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Él nos libró de una muerte tan segura y nos librará. En Él hemos puesto la esperanza de que nos seguirá librando.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

el cual nos libró, y nos libra; y en quien confiamos que aún nos librará de tan grande muerte;

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Otras versiones



2 Corintios 1:10
14 Referencias Cruzadas  

Cof Muchos son los males del justo; mas de todos ellos lo librará el SEÑOR;


Oídme, oh casa de Jacob, y todo el resto de la casa de Israel: los que sois traídos de vientre, los que sois llevados de matriz.


He aquí, nuestro Dios a quien honramos, puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará.


Entonces el rey mandó, y trajeron a Daniel, y le echaron en el foso de los leones. Y hablando el rey dijo a Daniel: El Dios tuyo, a quien tú continuamente sirves, él te libre.


Por causa de esto los judíos, tomándome en el Templo, intentaron matarme.


Que sea librado de los rebeldes que están en Judea, y que la ofrenda de mi servicio a los santos en Jerusalén sea acepta;


Mas nosotros tuvimos en nosotros mismos respuesta de muerte, para que no confiemos en nosotros mismos, sino en Dios, que levanta a los muertos;


como ignorados, pero conocidos; como muriendo, mas he aquí vivimos; como castigados, pero no mortificados;


Que por esto aún trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el Dios viviente, el cual es Salvador de todos los hombres, y mayormente de los fieles.


Mas el Señor me ayudó, y me esforzó para que por mí fuese cumplida la predicación, y todos los gentiles oyesen; y fui librado de la boca del león.


sabe el Señor librar de tentación a los píos, y reservar a los injustos para ser atormentados en el día del juicio;


Y añadió David: el SEÑOR que me ha librado de las garras del león y de las garras del oso, él también me librará de la mano de este filisteo. Y dijo Saúl a David: Ve, y el SEÑOR sea contigo.


Tomó luego Samuel una piedra, y la puso entre Mizpa y Sen, y le puso por nombre Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó el SEÑOR.