Porque de tal manera amó Dios al mundo, que hasta dio a su Hijo Unigénito, para que todo el que crea en Él no se pierda, sino que tenga vida eterna,
Toda Escritura que ha sido escrita por el espíritu, es provechosa para enseñanza, para amonestación, para corrección, para instrucción en la justicia,
¡Oh, profundidad de las riquezas, la sabiduría y el conocimiento de Dios! Porque nadie ha explorado sus juicios, y sus caminos son inescrutables,
Ninguna palabra obscena salga de su boca, sino la que sea buena y útil para edificación, para que impartan gracia a los oyentes.
sino que así como Aquel que los llamó es santo, sean santos en toda su manera de vivir,
pero si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda nuestra iniquidad.
En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Dios nos amó a nosotros y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.
y no sean conforme a este mundo, sino transfórmense por medio de la renovación de su mente, y disciernan cuál es la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios.
Pero los frutos del espíritu son: amor, gozo, paz, paciencia, afabilidad, bondad, confianza, humildad, dominio de sí mismo. Contra tales cosas no hay ley,
Y el Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y contemplamos su gloria; gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y verdad.
a quien Dios preordenó como propiciación por su sangre, mediante la fe, a causa de nuestros pecados cometidos anteriormente, por la oportunidad que Dios nos dio en su paciencia para la demostración de su justicia en este tiempo, para que Él sea el Justo y justifique mediante la justicia al que esté en la fe de nuestro Señor Jesucristo.
Éstas son las buenas nuevas que hemos escuchado de Él y se las anunciamos: Dios es luz y ninguna tiniebla hay en Él;
Y les he demostrado todas las cosas, de cómo debe uno trabajar y atender a los débiles, y tener presentes las palabras de nuestro Señor Jesús, porque Él dijo: 'Más bienaventurado es el que da que el que recibe'.
Yahweh no se tarda en sus promesas, como algunos lo tienen por tardanza, sino que es paciente por causa de ustedes, no deseando que ninguno se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento.
¿Qué diremos, pues, acerca de esto? Si Dios está a favor nuestro, ¿quién contra nosotros?
para que por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta, seamos sobremanera confortados, para que teniendo refugio en Él, estemos asidos firmemente de la esperanza que nos prometió,
a quien ha de manifestar a su debido tiempo el único bendito y poderoso Dios, Rey de reyes y Señor de señores, que es el único incorruptible y que mora en luz, a quien nadie puede tocar, y a quien ningún hombre ha visto ni es capaz de ver. A Él sea la honra y el dominio eterno para siempre. Amén.
y las cosas invisibles de Dios, su eterno poder y Deidad, son hechos evidentes desde que el mundo fue establecido[1], siendo entendidas en las creaciones de Él, para que no tengan excusa,
Pero Jesús los miró, y les dijo: Esto es imposible para los hombres, pero para Dios todo es posible.
No les ha sobrevenido prueba que no sea común a los hombres, pero Dios es fiel que no permitirá que sean ustedes probados más allá de lo que puedan, sino que dará la salida para su prueba de modo tal que puedan soportar.
ahora Dios muestra su amor para con nosotros, porque si cuando éramos pecadores el Cristo murió por nosotros,
Él es el esplendor de su gloria y la imagen de su esencia, y sustenta todas las cosas con el poder de su palabra. Y Él, habiendo llevado a cabo en su persona la limpieza de nuestros pecados, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas.
Observen a las aves del cielo no siembran, ni cosechan, ni almacenan en graneros, y su Padre que está en el Cielo las alimenta. ¿No son acaso ustedes más importantes que ellas?
Mi Dios, pues, suplirá para toda su necesidad, según sus riquezas, en la gloria de Jesucristo.
y enséñenles que guarden todo lo que les he ordenado. He aquí, yo estoy con ustede todos los días, hasta el fin del mundo[49]. Amén.
Y nosotros sabemos que a los que aman a Dios, Él los ayuda en todo para bien, a los que designó anticipadamente para que fueran llamados,
Que su mente no se complazca en el dinero, sino que lo que tengan les sea suficiente, porque Yahweh mismo dice: 'NO TE DEJARÉ NI TE DESAMPARARÉ',
Pues si ustedes siendo malos saben dar buenos regalos a sus hijos, ¿cuánto más su Padre que está en el Cielo dará cosas buenas a los que le pidan?
y nosotros hemos creído y conocido el amor que Dios tiene por nosotros, porque Dios es amor, y todo el que permanece en amor permanece en Dios.
Porque todas las cosas son de Él, y todo es por medio de Él, y todas las cosas existen por su mano. A Él sean nuestras alabanzas y nuestra bendición eternamente y para siempre. Amén.
porque no nos ha dado Dios espíritu de temor, sino de poder, de amor y de exhortación[1].
¿O eres insolente contra la riqueza de su bondad, contra su paciencia y contra la oportunidad que Él te ha dado, ignorando que la bondad de Dios te conduce al arrepentimiento?
Así brille su luz delante de los hombres, para que vean sus buenas acciones y glorifiquen ellos a su Padre que está en el Cielo.
Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de su gracia para recibir misericordia y hallar gracia para ser auxiliados en tiempo de aflicción.
Bendito es Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, que nos consuela en todas nuestras aflicciones para que nosotros seamos capaces también de consolar a los que están en cualquier aflicción con el consuelo con el cual somos consolados por Dios,
ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada podrán apartarme del amor de Dios que es por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Ustedes, pues, oren de esta manera: 'Padre nuestro que estás en el Cielo, santificado sea tu Nombre. 'Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el Cielo, así también en la Tierra.
Que el Dios de la paciencia y del consuelo les conceda pensar en armonía los unos respecto a los otros en Jesucristo,
sino que como está escrito: 'Cosas que ojos no vio, ni oído escuchó, ni han surgido en corazón de hombre, son las que Dios preparó para los que lo aman',
A los ricos de este mundo, ordena que no sean altivos en su forma de pensar ni tengan puesta su confianza en la incertidumbre de las riquezas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas abundantemente para nuestro disfrute.
porque es por su gracia que hemos sido salvos, mediante la fe; y esto no surgió de ustedes, sino que es don de Dios, no por obras, para que nadie se jacte,
asiéndonos firmemente de la confesión de nuestra esperanza, sin fluctuar, porque fiel es el que nos prometió.
pero si andamos en luz, así como Él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesús nos limpia de todos nuestros pecados.
Que el Dios de la esperanza los colme de todo gozo y paz en la fe, para que crezcan en su esperanza por el poder del espíritu santo.
porque sin fe es imposible que alguno agrade a Dios, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que Él existe, y que recompensa a los que lo buscan.
Por tanto, todo el que escuche estas mis palabras y las ponga por obra, será semejante a un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca,
Y en esto no hay distinción entre judíos y gentiles, porque uno es el Señor de todos ellos, que es generoso para con todo aquel que lo invoca:
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