Porque sus atributos invisibles –su eterno poder y su divinidad– se dejan ver desde la creación del mundo, y se perciben en las cosas creadas; de modo que no tienen excusa.
Y Elohim le dijo a Mosheh: “Ehyéh ashér Ehyéh” yo soy el que soy”. Y continuó: “Así les dirás a los yisraelitas: ‘Ehyéh Yo Soy me envió a ustedes’”.
Para el director de música. Alabanza de Dawid. El cielo cuenta la gloria de Elohim, el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día le da el mensaje al otro día, y una noche a la otra noche transmite sabiduría. No hablan, no hay palabras; no se escucha su voz; mas por toda la tierra sale su pregón, hasta el fin del mundo su mensaje, hasta el pabellón donde mora el sol.
Hacedor de cielo y tierra, del mar y todo lo que hay en ellos; que se mantiene fiel para siempre;
¿Dónde estabas tú cuando yo echaba los fundamentos de la tierra? Habla, si tienes entendimiento.
Porque toda casa la construye alguien, pero el constructor de todas las cosas es Yahweh.
Para el director de música. De Dawid. El necio piensa: “Yahweh no se ocupa”. Se han corrompido, practican cosas detestables, no hay quien haga lo bueno.
En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba con el Todopoderoso y [el que es] la Palabra era poderoso.*
sin embargo, para nosotros no hay más que un solo Elohim, el Padre, de quien proceden todas las cosas, y para quien vivimos; y un solo soberano, Yahoshúa el Mashíaj, mediante el cual existen todas las cosas, y por medio de quien vivimos también nosotros.
“Digno eres tú, oh Adonay y Elohim nuestro, de recibir la gloria, la honra y el poder; porque tú has creado todas las cosas, y por tu voluntad tienen ser y fueron creadas”.
Y cada uno de los cuatro seres vivientes tiene seis alas, y alrededor y por dentro están llenos de ojos. Ni de día ni de noche cesan de decir: “¡Santo, santo, santo es Yahweh, Êl Shaday, que era y que es y que será!”
Oí al mensajero de las aguas decir: “Justo eres tú que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado estas cosas.
Y sin fe es imposible agradarlo, porque es necesario que el que se acerca a Elohim crea que él existe y que recompensa a los que lo buscan.
Antes que nacieran los montes o que tú produjeras la tierra y el mundo, desde la eternidad hasta la eternidad tú eres 'El.
–como está escrito: “Te he constituido padre de muchas naciones– [y que sea válida] ante Elohim, en quien él creyó, que vivifica a los muertos y llama a las cosas que no existen como si existieran.
diciendo: “Te damos gracias, Yahweh Êl Shaday, que eres y que eras, porque has asumido tu gran poder, y reinas.
“Yo soy la Álef y la Tau”, dice Yahweh Elohim, “El Que Es, y Que Era y Que Será, el Shaday”.
Mi mano hizo todas estas cosas, y así todo llegó a existir –declara Yahweh. Sin embargo, a éste miraré con aprobación: al que es pobre y contrito de espíritu, que se ocupa de mi palabra.
Todas las cosas fueron hechas por medio de él, y sin él no se hizo nada de lo que se ha hecho.
Pero hay un Elahá en el cielo, quien revela los misterios. Él le ha hecho saber al rey Nevukhadnetsar lo que va a suceder en los últimos días. Tu sueño y las visiones de tu cabeza en tu cama son éstos:
Porque así ha dicho Yahweh, el Creador del cielo, el único que es ha'Elohim; el que formó la tierra y la hizo, el único que la estableció –no la creó vacía, sino que la formó para que fuera habitada: “Yo soy Yahweh, y no hay ningún otro.
Fuiste tú quien creó mi conciencia; tú me formaste en el vientre de mi madre. Te alabo, porque estoy hecho de manera asombrosa y maravillosa; tu obra es maravillosa; lo sé muy bien.
Pero si buscan allí a Yahweh su Elohim, lo hallarán, si lo buscan con todo su corazón y con todo su ser,
¡Tú eres grande en verdad, oh Yahweh Elohim! No hay nadie como tú, ni hay Elohim aparte de ti, según hemos oído siempre.
porque por medio de él fueron creadas todas las cosas que están en el cielo y en la tierra, visibles e invisibles, sean tronos, dominios, principados o autoridades. Todo fue creado por medio de él y para él. Él existe antes que todas las cosas, y todas las cosas subsisten en él.
Oh Yahweh, tú eres mi Elohim; te exaltaré; alabaré tu nombre. Porque has planeado maravillas desde antaño, tus designios son firmes y verdaderos.
Como tú no comprendes cómo entra el espíritu al cuerpo en el vientre de la mujer encinta, así no comprenderás la obra de ha'Elohim, quien hace todas las cosas.
En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba con el Todopoderoso y [el que es] la Palabra era poderoso.* Él estaba en el principio con el Todopoderoso. Todas las cosas fueron hechas por medio de él, y sin él no se hizo nada de lo que se ha hecho.
Porque hay un solo Elohim y un solo mediador entre Elohim y los hombres, Yahoshúa el Mashíaj hombre,
Pero pregúntales a los bestias, y ellas te enseñarán; a las aves del cielo, y te informarán. O háblale a la tierra, ella te enseñará; a los peces del mar, y te informarán. ¿Cuál de todos ellos no sabe que la mano de Yahweh ha hecho esto? En sus manos está la vida de todo ser y el aliento de toda la humanidad.
¿Dónde estabas tú cuando yo echaba los fundamentos de la tierra? Habla, si tienes entendimiento. ¿Sabes quién fijó sus dimensiones o quién la midió con un cordel? ¿Sobre qué están afirmados sus cimientos? ¿Quién puso su piedra angular, cuando aclamaban juntas las estrellas del alba, y gritaban de júbilo todos los hijos de Elohim?
Y de esto depende la vida eterna: que te conozcan a ti como el único Elohim verdadero, y a Yahoshúa como el Mashíaj que tú has enviado.
“¡Desistan! Reconozcan que yo soy Elohim; yo domino las naciones, yo domino la tierra”.
porque tú, oh Yahweh, eres Elyón Supremo sobre toda la tierra, estás muy por encima de todos los elohim.
Canción de las subidas. Alzo mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Yahweh, hacedor de cielo y tierra.
¿No lo sabes? ¿No has oído? Yahweh es el Elohim eterno, Creador de los confines de la tierra? Nunca se cansa ni se fatiga, y su sabiduría es insondable.
Pero tú, oh Yahweh, reinarás para siempre; tu trono es de generación en generación.
Reconozcan que Yahweh es Elohim; él nos hizo y somos suyos, su pueblo, y ovejas que él atiende.
Pero pregunto yo: ¿Acaso no oyeron? ¡Claro que sí! “Por toda la tierra ha salido el anuncio de ellos; y hasta los confines del mundo, sus palabras”.
el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible, a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver. A él sea la honra y el dominio eterno. Amén.
“Ese es el Poderoso que hizo el mundo y todas las cosas que hay en él. Y como es Soberano del cielo y de la tierra, él no habita en Templos hechos de manos, ni le sirven manos humanas como si necesitara algo, porque él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. “De uno solo ha hecho toda raza de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra. Él ha determinado de antemano el orden de los tiempos y los límites de su habitación, para que busquen a Yahweh, a ver si de alguna manera, aunque sea a tientas, palpan y lo hallan. Aunque, a la verdad, él no está lejos de ninguno de nosotros. Porque ‘en él vivimos, nos movemos y somos’. Como también han dicho algunos de sus poetas: ‘Porque también somos linaje de él’.
Cuando los gentiles, que no tienen la Torah, practican espontáneamente lo que requiere la Torah, ellos que no tienen Torah son una Torah para sí mismos. Con eso muestran el contenido de la Torah escrito en sus corazones; por eso su conciencia les da testimonio, y sus razonamientos se acusan o se defienden unos a otros.
Confía en Yahweh con todo tu corazón, y no te fíes de tu propio entendimiento. En todos tus caminos tómalo en cuenta, y él suavizará tus sendas.
“Ustedes son mis testigos –declara Yahweh– mi siervo que yo escogí. Para que me conozcan y crean en mí, y entiendan que Yo Soy: Antes de mí no fue formado ningún 'El, y después de mí ninguno existirá. Ninguno sino yo, Yahweh; fuera de mí, nadie puede salvar.
Así debe alumbrar la luz de ustedes delante de la gente, para que vean sus buenas obras y glorifiquen a su Padre que está en el cielo.
ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna otra cosa creada podrá separarnos del amor de Elohim, demostrado mediante el Mashíaj Yahoshúa, nuestro Maestro.
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