Yo les dije esto para que encuentren paz en mí. En el mundo ustedes tendrán que sufrir, pero, ¡sean valientes! Yo he vencido al mundo.
Yo estaré contigo así como estuve con Moisés. Nadie podrá derrotarte mientras vivas porque yo nunca te abandonaré ni te dejaré.
Sean fuertes y valientes; no tengan miedo ni se aterroricen de ellas, porque el SEÑOR su Dios irá con ustedes. Él no los abandonará ni los olvidará».
Estimado hermano: le pido a Dios que te vaya bien en todo y que tengas buena salud física, así como la tienes espiritualmente.
Ahora bien, fe es la realidad de lo que esperamos. Es la prueba palpable de lo que no podemos ver.
Él secará todas sus lágrimas, y ya no habrá muerte ni sufrimiento, ni llanto, ni dolor, porque el mundo como existía antes ya desapareció».
Así que Dios nos aprobó gracias a la fe, y ahora, por medio de nuestro Señor Jesucristo, hay paz entre Dios y nosotros.
El fiel amor del SEÑOR nunca termina; su compasión no tiene fin,cada mañana se renueva. ¡Inmensa es su fidelidad!
Ustedes fueron salvos gracias a la generosidad de Dios porque tuvieron fe. No se salvaron a sí mismos, su salvación fue un regalo de Dios.La salvación no es algo que ustedes hayan conseguido, pues nadie puede decir que se salvó a sí mismo.
Pero tú, SEÑOR, eres mi escudo. Tú me honras y me animas. Te pido ayuda SEÑOR, y me respondes desde tu monte santo. SelahMe voy a dormir tranquilo y sé que despertaré, porque el SEÑOR me protege.Por eso no me asustaré aunque miles me rodeen para atacarme.
Afortunado el que no sigue el consejo de los perversos, ni el ejemplo de los pecadores, ni se une con los que andan burlándose de todo.Al contrario, le gusta la enseñanza del SEÑOR y la estudia día y noche.Será tan fuerte como un árbol plantado junto a corrientes de agua fresca, que da su fruto en el momento adecuado y al que nunca se le caen las hojas. Le irá bien en todo lo que haga.
y enséñenles a obedecer todo lo que yo les he mandado. Tengan presente que yo estaré con ustedes todos los días hasta el fin del mundo.
Puede que mi mente y mi cuerpo se destruyan, pero tengo a Dios que es la roca que amo; él es todo lo que necesito en mi vida.
Esdras les dijo: «Vayan, coman una cena, beban vino dulce y denle una parte a aquellos que no tienen nada preparado porque este día es sagrado para nuestro SEÑOR. No estén tristes porque la alegría en el SEÑOR es su fortaleza».
Pero los que tienen su esperanza puesta en el SEÑOR renovarán sus fuerzas. Les crecerán alas como a las águilas; correrán sin fatigarse, caminarán sin cansarse.
Yo sé cómo vivir en pobreza o en abundancia. Conozco el secreto de estar feliz en todos los momentos y circunstancias: pasando hambre o estando satisfecho; teniendo mucho o teniendo poco.Puedo enfrentar cualquier situación porque Cristo me da el poder para hacerlo.
SEÑOR, tú eres mi roca; eres quien me salva. Deseo que te complazca todo lo que digo y pienso.
Confía en el SEÑOR totalmente, no en tu propia sabiduría.Ten en cuenta a Dios en todo lo que hagas, y él te ayudará a vivir rectamente.
SEÑOR, tú escuchas mi voz cada mañana en oración. Cada mañana te presento cuidadosamente mi caso y espero atentamente tu respuesta.
Tú les das paz a los que se mantienen pensando en ti, porque en ti han puesto su confianza.
Así que, primero busquen el reino de Dios y su justicia, y Dios les dará todo lo que necesitan.
Muéstrame tu fiel amor por la mañana, porque en ti he puesto mi confianza. Pongo mi vida en tus manos, muéstrame lo que debo hacer.
Que Dios, quien da esperanza, los llene de toda alegría y paz a ustedes que tienen fe en él. Así tendrán tanta esperanza que llegará a otros por el poder del Espíritu Santo.
Mi entendimiento no puede con tus pensamientos; la suma de ellos es inmensa.Si pudiera contar cada uno de tus pensamientos, serían más numerosos que los granos de arena, y cuando terminara de contarlos, tendría todavía que continuar.
Nosotros somos obra de Dios, creados en Jesucristo para realizar las buenas obras que Dios ya planeó de antemano para que nos ocupáramos de ellas.
El que habita a la sombra del Altísimo, se acoge a la protección del Todopoderoso.Nada malo te sucederá, no ocurrirá ningún desastre en tu casa;porque él dará orden a sus ángeles para que te protejan a dondequiera que vayas.Ellos te levantarán con sus manos para que ninguna piedra te lastime el pie.Pisotearás leones y serpientes venenosas; triunfarás sobre cachorros de león y sobre monstruos. «Yo lo salvaré, porque me ama; lo protegeré, porque reconoce mi nombre.Me llamará y yo le responderé; estaré con él cuando se encuentre en dificultades; lo rescataré y haré que le rindan honores.Haré que disfrute de una larga vida y le mostraré mi salvación».Yo le digo al SEÑOR: «Tú eres mi refugio, mi fortaleza. Dios mío, confío en ti».
»Vengan a mí los que estén cansados y agobiados, que yo los haré descansar.Acepten mi enseñanza y aprendan de mí que soy paciente y humilde. Conmigo encontrarán descanso.Ellos le preguntaron a Jesús: —¿Eres el que iba a venir o debemos esperar a alguien más?Mi enseñanza es agradable y mi carga es fácil de llevar».
Miro a lo alto de las montañas en busca de ayuda, ¿de dónde vendrá mi ayuda?Mi ayuda vendrá del SEÑOR, el creador del cielo y de la tierra.
Seamos solidarios. Ayudemos a los demás a demostrar su amor y a hacer el bien.Algunos están faltando a las reuniones, y eso no está bien. Reunámonos para animarnos unos a otros y con mayor razón ahora que vemos que se acerca el día.
No debemos cansarnos de hacer el bien. Si no nos rendimos, tendremos una buena cosecha en el momento apropiado.
Alégrense en la esperanza, tengan paciencia en las dificultades y sean constantes en la oración.
Cuando atravieses las aguas, yo estaré contigo. Cuando cruces los ríos, no te ahogarás. Cuando tengas que atravesar por fuego, no te quemarás; las llamas no arderán en ti.
Estén siempre alegres.Nunca dejen de orar.Den gracias a Dios siempre, porque eso es lo que él quiere para ustedes en Jesucristo.
El SEÑOR está conmigo, y por eso no tengo miedo. ¿Qué daño me puede hacer el ser humano?El SEÑOR está conmigo, él me ayuda, así que venceré a mis enemigos.
Yo confié sinceramente en el SEÑOR, y él escuchó mi oración.SEÑOR, no he guardado para mí la maravilla de tus obras. He hablado públicamente de tu justicia y de tu salvación. No he escondido a la gran asamblea tu fiel amor ni tu verdad.No seas tacaño, SEÑOR, con tu compasión. Que tu fiel amor y fidelidad me guarden para siempre.Porque se me han venido encima muchas desgracias. Mis pecados me han atrapado y no puedo escapar de ellos. Son tantos los pecados que he cometido, que he perdido todo el valor.SEÑOR, por favor rescátame. ¡SEÑOR, ven pronto a ayudarme!Que todos los que buscan destruirme terminen sintiéndose avergonzados y humillados. Que los que quieren hacerme daño se retiren sin lograr nada.Que los que se burlan de mí retrocedan avergonzados.Y que los que buscan tu ayuda, encuentren dicha y felicidad. Que los que aman tu salvación puedan alabarte siempre diciendo: «¡Cuán grande es el SEÑOR!»Señor, ten compasión de mí, aunque sea tan solo un hombre pobre e indefenso. Dios mío, tú eres quien me ayuda y me salva. ¡No llegues demasiado tarde!El SEÑOR me sacó del pozo de la destrucción; me sacó del barro y del lodo. Me puso los pies en la roca, en tierra firme, donde puedo andar con seguridad.Él puso una canción nueva en mi boca, una canción de alabanza a Dios. Mucha gente verá lo que Dios ha hecho y lo alabará; se llenarán de confianza en él.
Estoy convencido de que Dios empezó una buena obra entre ustedes y la continuará hasta completarla el día en que Jesucristo regrese.
¿Qué podemos decir de todo esto? Si Dios está a nuestro favor, nadie podrá estar contra nosotros.
Porque el Espíritu que Dios nos ha dado no nos hace cobardes, sino que él es para nosotros fuente de poder, amor y buen juicio.
No digan malas palabras, sino palabras que ayuden y animen a los demás, para que lo que hablen le haga bien a quien los escuche.
El SEÑOR Dios brilla sobre nosotros y nos protege; nos bendice con bondad y gloria. El SEÑOR no le niega ninguna bendición al que vive con integridad.
El SEÑOR te guiará permanentemente, dará satisfacción a tus necesidades cuando estés en tierras resecas, y fortalecerá tus huesos. Serás como un jardín, como manantial de agua que nunca se seca.
Dios es nuestro refugio y fortaleza; siempre está dispuesto a ayudarnos en los momentos difíciles.
La seguridad que tenemos al estar unidos a Dios es esta: Dios escucha nuestras oraciones cuando le pedimos conforme a su voluntad.
Para el afligido, todo el tiempo es tristeza, pero para el alegre, la vida es una fiesta.
Cuando al SEÑOR le agrada nuestra vida, nos guía para que no caigamos.Si tropezamos en el camino, no caeremos porque el SEÑOR estará allí para sostenernos e impulsarnos.
Me llamará y yo le responderé; estaré con él cuando se encuentre en dificultades; lo rescataré y haré que le rindan honores.
Pero el Espíritu produce el fruto de amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad,humildad y dominio propio. No existe ninguna ley en contra de esas cosas.
Porque tú me rescataste y me salvaste de la muerte. Me ayudaste a no ser derrotado para que ande en la presencia de Dios, bajo la luz que solo los que tienen vida pueden ver.
Le pido a mi Dios que les dé a ustedes todo lo que necesitan, conforme a las espléndidas riquezas que tiene en Jesucristo.
Si alguien está unido a Cristo, hay una nueva creación. Lo viejo ha desaparecido y todo queda renovado.
»Por eso les digo: no se preocupen por la comida ni por la bebida que necesitan para vivir, ni tampoco por la ropa que se van a poner. Ciertamente la vida es más que la comida y el cuerpo más que la ropa.Miren a las aves del cielo, ellas no siembran ni cosechan ni tampoco guardan nada en graneros. Sin embargo, su Padre que está en el cielo les da alimento. ¿No valen ustedes mucho más que ellas?¿Quién de ustedes, por más que se preocupe, va a añadir una hora a su vida?
Dedíquense a la oración. Estén listos para enfrentar cualquier situación mediante la oración y el dar gracias a Dios.
El SEÑOR es mi pastor, nada me falta.Me lleva a descansar a prados verdes, y me conduce a manantiales de agua fresca.Él me da nueva vida. Me lleva por buenos caminos para mostrarme lo bondadoso que es.
La sabiduría comienza por respetar al SEÑOR; los que obedecen sus mandamientos demuestran que son inteligentes. ¡La alabanza a Dios permanece para siempre!
La enseñanza del SEÑOR es perfecta, reconforta el ánimo. Lo que dice el SEÑOR en su pacto es seguro, ayuda a los ignorantes a volverse sabios.
Entonces, acerquémonos con confianza al trono de Dios que es generoso. Allí recibiremos su compasión y su bondad para ayudarnos cuando lo necesitemos.
Entonces, hermanos les pido que respondan a la gran bondad que Dios nos ha mostrado. Ofrézcanle sus cuerpos como sacrificio vivo. Vivan sólo para Dios y sean agradables a él. Tal adoración es su verdadero propósito como seres humanos razonables.
Por lo tanto, hermanos, permanezcan firmes y no dejen que nada los haga cambiar. Dedíquense totalmente a trabajar para el Señor, bien saben que su trabajo no es en vano.
Así mismo, ustedes deben ser luz para los demás de tal manera que todos puedan ver sus buenas obras y adoren a su Padre que está en los cielos.
No temas, estoy contigo. Yo soy tu Dios, no tengas miedo. Te fortaleceré, sí, te ayudaré. Te salvaré con mi mano victoriosa.
Hagan todo sin quejarse y sin discutir.Así serán hijos de Dios, sin culpa y sin falta viviendo entre una generación perversa y mala. De esa forma brillarán entre ellos como estrellas en un mundo de oscuridad.
Pero yo confío en ti SEÑOR; yo digo: «Tú eres mi Dios».Mi vida está en tus manos; sálvame de mis enemigos y de los que me persiguen.
Si vivimos, para el Señor vivimos y si morimos, para el Señor morimos. Así que vivos o muertos pertenecemos al Señor.
Dios dice: «Dejen de pelear y acepten que yo soy Dios, todos me darán honor. Yo gobierno a las naciones y controlo al mundo entero».
Tú les das paz a los que se mantienen pensando en ti, porque en ti han puesto su confianza.Confía siempre en el SEÑOR, porque el Señor DIOS es refugio eterno.
Pero el Señor me dijo: «Mi bondad es todo lo que necesitas, porque cuando eres débil, mi poder se hace más fuerte en ti». Por eso me alegra presumir de mi debilidad, así el poder de Cristo vivirá en mí.
Siempre dediquen al Señor Jesús todo lo que digan y lo que hagan, dando gracias a Dios Padre a través de Jesús.
»Ustedes son la luz que alumbra al mundo. Una ciudad que está en un monte no se puede esconder.
El SEÑOR te protegerá de todo mal, protegerá tu vida.El SEÑOR protegerá tu ida y tu venida, desde ahora y para siempre.
Tú vales mucho para mí, te estimo mucho, te amo. He dado gente para poder tenerte, y naciones para rescatarte con vida.
Así mismo, ustedes considérense muertos en cuanto al pecado y vivos para servir a Dios en Jesucristo.
Le pedimos al Señor que aumente y multiplique el amor que tienen unos por otros y por todos, y que ustedes se amen unos a otros, así como nosotros los amamos a ustedes.Todo esto lo pedimos para que él los fortalezca interiormente y para que sean santos ante Dios nuestro Padre. De esa manera estarán preparados cuando nuestro Señor Jesús regrese de nuevo con todo su pueblo santo.
Dios mío, mi corazón está firme; te cantaré y te alabaré de todo corazón.Pero yo dije: «¿Quién me guiará a la ciudad fortificada? ¿Quién me guiará hasta Edom?Es que tú nos abandonaste. Dios mío, ¿saldrás tú con nuestro ejército?Ayúdanos a derrotar al enemigo, pues la ayuda del ser humano es inútil.Con Dios conseguiremos la victoria; ¡él pisoteará a nuestros enemigos!»Arpa y lira, ¡despierten! Despertaré el nuevo día.
Eres bueno y perdonas, Señor; es abundante tu fiel amor para todos los que te piden ayuda.
Ayúdense cuando se encuentren en problemas, pues así estarán cumpliendo la ley de Cristo.
Así podremos decir con seguridad: «El Señor es mi ayuda; no tendré miedo. ¿Qué daño puede hacerme un simple mortal?»
Únete al canal de BibliaTodo en tu app favorita: