Crecemos entre el ruido y el caos, donde voces prefabricadas intentan ahogar esa conexión intrínseca con lo divino. Se presenta una realidad árida, desprovista de esperanza, pero en ti, en lo más sagrado de tu ser, resplandece la misma inocencia que aquel niño. Tu corazón es ese terreno fértil donde la semilla de la fe se extiende, floreciendo en abundancia.
No te conformes con teorías frías, con doctrinas vacías. Tu vida es una sinfonía constante donde Dios desea ser el director de orquesta. Él te busca, quiere latir junto a ti, respirar en tu aliento, inundar cada espacio de tu ser con su inagotable gracia. No le limites al domingo en un templo, Él te anhela cada segundo del día.
¿Quieres sentir Su plenitud?
Acepta la verdad palpitante en tu corazón: «cercano está Jehová a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras»
. ¡Salmos 145:18! Y vivir según esta verdad, este privilegio y propósito diario transforma tu vida; te levanta hacia tu destino de hijo de Dios, en cada rincón de la tierra.
Esa presencia que buscas, ese aliento que deseas, se encuentra en la integridad, en dar el testimonio de vida como aquel hijo suyo de corazón sencillo.
«El que camina en integridad anda confiado, Pero el que pervierte sus caminos será quebrantado.»
Confíale tus batallas, y que se convierta cada amanecer en suya por que así vivirás conforme a su sabiduría y experimentarás la verdadera felicidad que radica en una relación de confianza entre tu Creador y tú.
Como el salmista, quien caminó con plena confianza en el Todopoderoso, te invito a que hagas ese pacto con el Creador, reconociéndolo, venerándolo, confiando, no habrá nada ni nadie que detenga el propósito que Él tiene contigo; entonces no te faltará nada.
El desafío esta delante, toma este instante y con voz valiente hazlo público:
Hoy, en tu caminar, busca a tu creador en cada acto que lleves acabo y Él inundara tu senda de bondades y tu corazón de gozo, que sea el lema de tu vida "Dios ahora aquí!"
Abraza esta verdad profunda e inefable “Temed a Jehová, vosotros sus santos, pues nada falta a los que le temen”
. Salmos 34:9, tu heredad está en el Reino de Dios ¡accede y toma lo que te pertenece!.
Recuerda **"Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas". Mateo 6:33**.
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Temed a Jehová, vosotros sus santos, Pues nada falta a los que le temen.
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