Después los sacerdotes y los levitas se levantaron y bendijeron al pueblo; y fue escuchada su voz, y su oración llegó hasta la morada de su santidad en los cielos.
Salmos 68:5 - La Biblia Textual 3a Edicion Padre de huérfanos y protector de viudas, Es ’Elohim en la morada de su Santuario. Matoleo zaidiBiblia Reina Valera 1960 Padre de huérfanos y defensor de viudas Es Dios en su santa morada. Biblia Nueva Traducción Viviente Padre de los huérfanos, defensor de las viudas, este es Dios y su morada es santa. Biblia Católica (Latinoamericana) Padre del huérfano, defensor de las viudas, ese es Dios en su santa morada. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Alabad al Señor y cantad salmos a su nombre, abrid camino al que cabalga en las estepas: Yahveh es su nombre; regocijaos ante él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Padre de huérfanos y defensor de viudas, es Dios en su santa morada: Biblia Traducción en Lenguaje Actual 5 (6) Dios, que vive en su santo templo, cuida a los huérfanos y defiende a las viudas; |
Después los sacerdotes y los levitas se levantaron y bendijeron al pueblo; y fue escuchada su voz, y su oración llegó hasta la morada de su santidad en los cielos.
Y yo he construido una Casa sublime para ti, un lugar en que habites para siempre.
r Sin embargo Tú lo ves, Porque observas el agravio y la vejación, Para retribuirlo con tu mano. ¡A ti se encomienda el desvalido! ¡Tú eres el defensor del huérfano!
Para vindicar a los huérfanos y a los oprimidos, Para que el hombre de la tierra no vuelva a causar opresión.
YHVH guarda a los extranjeros, Al huérfano y a la viuda sostiene, Y trastorna el camino de los impíos.
Que defienda a la gente oprimida, Que salve a los hijos del menesteroso, Y quebrante al opresor.
Dijo además ’Elohim a Moisés: Así dirás a los hijos de Israel: YHVH, el Dios de vuestros padres, Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Éste es mi Nombre para siempre jamás, y éste es mi memorial de generación en generación.
Tus príncipes° son rebeldes y cómplices de ladrones, Todos aman el soborno y corren tras las dádivas. No hacen justicia al huérfano ni la causa de la viuda llega a ellos.
Y diréis aquel día: ¡Dad gracias a YHVH, e invocad su Nombre! ¡Contad a los pueblos sus proezas! ¡Proclamad que su Nombre es excelso!
Porque así dice el Alto y Excelso, Morador eterno, cuyo nombre es Santo: Yo habito en la altura sagrada, Pero estoy con los de espíritu humilde y quebrantado, Para reanimar al de espíritu humilde y vivificar el corazón quebrantado.
Así dice YHVH: Los cielos son mi trono, y la tierra estrado de mis pies: ¿Dónde está la casa que me habréis de edificar, Y dónde el lugar de mi reposo?
Se han puesto gordos y lustrosos, Y han traspasado los límites del mal: No defienden la causa, La causa del huérfano, Para que prospere, Ni mantienen el derecho del pobre.
Asiria no nos salvará; Ya no montaremos a caballo, Ni diremos más a la hechura de nuestras manos: ¡Dioses nuestros sois!° Porque sólo en ti halla misericordia el huérfano.
que hace justicia al huérfano y a la viuda, y ama al extranjero, dándole pan y vestido.
Contempla desde tu santa morada, desde los cielos, y bendice a tu pueblo Israel y a la tierra que nos has dado, como juraste a nuestros padres, tierra que mana leche y miel.