Estas son las postreras palabras de David: Oráculo de David ben Isaí, Oráculo del hombre que fue exaltado, El ungido del Dios de Jacob, El dulce salmista de Israel:
Salmos 141:6 - La Biblia Textual 3a Edicion Sean lanzados sus jueces contra los costados de la peña, Y oigan mis dichos, que son agradables. Matoleo zaidiBiblia Reina Valera 1960 Serán despeñados sus jueces, Y oirán mis palabras, que son verdaderas. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando a sus líderes los arrojen por un acantilado, los perversos escucharán mis palabras y descubrirán que son verdad. Biblia Católica (Latinoamericana) Sus jefes fueron echados desde el peñón, comprendieron entonces que hablaba con bondad;' Biblia Serafín de Ausejo 1975 yo sigo en mi oración contra sus maldades. Despeñan a sus jueces de la roca y escuchan con burla mis palabras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Sus jueces serán derribados en lugares peñascosos, y oirán mis palabras, que son dulces. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Cuando los gobernantes malvados acaben en la ruina, se acordarán de mis palabras y sabrán que les hablé con dulzura. |
Estas son las postreras palabras de David: Oráculo de David ben Isaí, Oráculo del hombre que fue exaltado, El ungido del Dios de Jacob, El dulce salmista de Israel:
Todos estos hombres de guerra, listos para la batalla, vinieron con corazón sincero a Hebrón, para hacer que David reinara sobre todo Israel; también todos los demás de Israel eran de un mismo parecer para hacer reinar a David.
Y dijo David a toda la asamblea de Israel: Si os parece bien y si es la voluntad de YHVH nuestro Dios, enviaremos a todas partes por nuestros hermanos que han quedado en todas las tierras de Israel, y por los sacerdotes y levitas que están con ellos en sus ciudades y ejidos, para que se reúnan con nosotros,
Y los hijos de Judá capturaron vivos a otros diez mil, y los llevaron a la cumbre de la peña, y los arrojaron desde la cumbre de la peña, y todos ellos se hicieron pedazos.
Eres el más hermoso de los hijos de los hombres, La gracia se derramó en tus labios, Por tanto, ’Elohim te ha bendecido para siempre.
Y todos daban° testimonio de Él, y se maravillaban de las palabras de gracia que salían de su boca, pero decían: ¿No es éste el hijo de José?