Y gritaban desaforadamente en lengua judía al pueblo de Jerusalem que estaba en el muro, para intimidarlos y aterrorizarlos a fin de apoderarse de la ciudad.
Isaías 36:13 - La Biblia Textual 3a Edicion Y poniéndose en pie, Rabsaces gritó en judío a voz en cuello: Oíd las palabras del gran rey, el rey de Asiria. Matoleo zaidiBiblia Reina Valera 1960 Entonces el Rabsaces se puso en pie y gritó a gran voz en lengua de Judá, diciendo: Oíd las palabras del gran rey, el rey de Asiria. Biblia Nueva Traducción Viviente Después el jefe del Estado Mayor se puso de pie y le gritó en hebreo a la gente que estaba sobre la muralla: «¡Escuchen este mensaje del gran rey de Asiria! Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces el general se puso de pie y hablando en alta voz pronunció, en judío, estas palabras: 'Oigan el mensaje del gran rey de Asiria. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y a continuación, el copero mayor, puesto en pie, gritó en alta voz en lengua judía: 'Escuchad la palabra del gran rey, del rey de Asiria. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces el Rabsaces se puso en pie, y gritó a grande voz en lengua judaica, diciendo: Oíd las palabras del gran rey, el rey de Asiria. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Después el oficial asirio se puso de pie y gritó muy fuerte en hebreo: «Escuchen lo que dice el gran rey de Asiria: |
Y gritaban desaforadamente en lengua judía al pueblo de Jerusalem que estaba en el muro, para intimidarlos y aterrorizarlos a fin de apoderarse de la ciudad.
Entonces Eliaquim, Sebna y Joa, dijeron al Rabsaces: Te rogamos que hables a tus siervos en arameo°, que nosotros lo entendemos, no nos hables en judío° ante la gente que está sobre el muro.
Pero respondió Rabsaces: ¿Crees que mi señor me ha enviado a hablar estas palabras a ti y a tu señor? ¿No me ha enviado a los hombres que están en el muro, expuestos a comerse sus propios excrementos y beberse sus orinas con vosotros?
Y les dijo Rabsaces: Decid a Ezequías: Así afirma el gran rey, el rey de Asiria: ¿En qué fundas tu confianza?
Quizá YHVH tu Dios haya escuchado las palabras del Rabsaces, a quien su amo, el rey de Asiria, mandó para provocar al Dios viviente, y castigue las palabras que YHVH tu Dios ha oído. ¡Eleva pues oración por el remanente que aún subsiste!
Sabed que Adonay los sumergirá en las aguas del Éufrates, Torrenciales e impetuosas (el rey de Asiria con todo su ejército), Que rebasan los cauces y desbordan las riberas.
Ahora yo, Nabucodonosor, alabo y engrandezco y glorifico al Rey de los cielos, porque todas sus obras son verdaderas y justos sus caminos, y Él puede abatir a aquellos que andan con soberbia.