Luego ’Elohim suscitó un espíritu maligno entre Abimelec y los señores de Siquem, de modo que los señores de Siquem traicionaron a Abimelec,
1 Samuel 16:15 - La Biblia Textual 3a Edicion Y los siervos de Saúl le dijeron: He aquí, un espíritu malo de parte de Dios te atormenta. Matoleo zaidiBiblia Reina Valera 1960 Y los criados de Saúl le dijeron: He aquí ahora, un espíritu malo de parte de Dios te atormenta. Biblia Nueva Traducción Viviente Algunos de los siervos de Saúl le dijeron: —Un espíritu atormentador de parte de Dios te está afligiendo. Biblia Católica (Latinoamericana) Los servidores de Saúl le dijeron: 'Un mal espíritu de Dios te produce esos sustos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijeron entonces a Saúl sus servidores: 'Mira que te atormenta un mal espíritu de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los criados de Saúl le dijeron: He aquí ahora, que el espíritu malo de parte de Dios te atormenta. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Un día, uno de los sirvientes de Saúl le dijo: «Dios ha enviado sobre Su Majestad un espíritu malo, y le está haciendo mucho daño. |
Luego ’Elohim suscitó un espíritu maligno entre Abimelec y los señores de Siquem, de modo que los señores de Siquem traicionaron a Abimelec,
YHVH dijo a Samuel: ¿Hasta cuándo lamentarás por Saúl, si Yo lo he rechazado como rey de Israel? Llena tu cuerno con aceite, y ve, que Yo te enviaré a Isaí betlemita, porque de entre sus hijos me he provisto rey.
Y el Espíritu de YHVH se apartó de Saúl, y un espíritu malo de parte de YHVH lo aterrorizaba.
Ordene nuestro señor a tus siervos que están ante ti, que busquen un varón que sepa tañer el arpa; y acontecerá que cuando te acometa el mal espíritu de parte de Dios, tañerá con su mano y te pondrás bien.
Al día siguiente, aconteció que un mal espíritu de parte de Dios se apoderó de Saúl, quien desvariaba furioso en su casa, y David tañía con su mano, como solía hacerlo día a día, y Saúl tenía su lanza en su mano.
Pero el espíritu malo de parte de YHVH vino otra vez° sobre Saúl estando él sentado en su casa con su lanza en la mano, mientras David tañía con la mano.