La asignación fue para el resto de la tribu de Manasés, a las familias de Abiezer, Jelec, Asriel, Siquén, Héfer y Semidá. Estos eran los descendientes varones de Manasés, hijo de José, por familias.
El ángel del Señor vino y se sentó bajo la encina de Ofra que pertenecía a Joás el abiezerita. Su hijo Gedeón estaba trillando allí el trigo en un lagar para ocultarlo de los madianitas.
“¿Y acaso qué he logrado yo en comparación con ustedes?” respondió Gedeón. “¡Incluso las uvas que sobran en Efraín son mejores que toda la cosecha de uvas de Abiezer!