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Referencias Cruzadas
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Números 22:32

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El ángel del Señor le preguntó: “¿Por qué golpeaste a tu burro tres veces? Escucha, he venido a enfrentarme a ti porque estás siendo obstinado.

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19 Referencias Cruzadas  

El Señor es bueno con todos, y muestra misericordia hacia todas sus criaturas.

Él alimenta a los animales, y a los cuervos cuando lo piden.

Tu bondad es como las más altas montañas, tu justicia como los océanos más profundos. Señor, tú salvas tanto a las personas como a los animales.

Los que viven en rectitud respetan al Señor, pero los que viven con deshonestidad lo aborrecen.

Las personas creen que todo lo que hacen está bien, pero el Señor mira sus intenciones.

Si tienes integridad, estarás a salvo; pero si vives una vida torcida, caerás.

Mejor es ser pobre y tener integridad, que ser tramposo y rico.

¿No debería yo estar preocupado por la gran ciudad de Nínive, donde habitan ciento veinte mil personas que no saben dónde está su derecha y dónde está su izquierda, sin mencionar a los animales?”

Pueblo mío, recuerden lo que Balac, el rey de Moab, estaba planificando hacer, y lo que Balaam, el hijo de Beor le dijo; y lo que sucedió desde Sitín hasta Guilgal, a fin de que conozcan las cosas buenas que hace el Señor.

Dios vino a Balaam durante la noche y le dijo, “Ya que estos hombres han venido por ti, levántate y ve con ellos. Pero sólo haz lo que yo te diga”.

Dios se enfadó porque Balaam había decidido irse. El ángel del Señor vino y se paró en el camino para enfrentarlo. Balaam iba montado en su burro, y estaba acompañado por sus dos sirvientes.

El Señor le dio al burro la habilidad de hablar y le dijo a Balaam: “¿Qué te he hecho para que me golpees tres veces?”

El burro me vio y me evitó tres veces. Si no me hubiera evitado, ya te habría matado y dejado vivir al burro”.

El ángel del Señor le dijo a Balaam, “No, puedes ir con los hombres, pero sólo di lo que yo te diga”. Así que Balaam continuó con los oficiales de Balac.

“¡Estás lleno de engaño y de todo tipo de mal, hijo del diablo, enemigo de todo lo recto! ¿Nunca dejarás de pervertir los caminos verdaderos del Señor?

Porque no vinieron a recibiros con comida y agua en su viaje desde Egipto, y contrataron a Balaam, hijo de Beor, de Petor en Mesopotamia, para maldeciros.

No se debe amordazar a un buey cuando está pisando el grano.




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