Números 16:41

Versión Biblia Libre

Al día siguiente todos los israelitas se quejaron a Moisés y Aarón, diciendo: “¡Han matado al pueblo del Señor!”

Referencias Cruzadas

1 Reyes 18:17

Cuando Acab vio a Elías, le dijo: “¿Eres tú el que está causando problemas a Israel?”

Salmos 106:13

Pero ellos olvidaron rápidamente lo que Dios había hecho por ellos, y no escucharon sus advertencias.

Salmos 106:23

Y entonces dijo que iba a destruirlos, pero Moisés, su líder escogido, se colocó entre Dios y el pueblo para persuadirlo de nos destruirlos en su ira.

Isaías 26:11

Señor, tú tienes la mano levantada, pero ellos no lo ven. Que vean tu apasionado compromiso por tu pueblo y se avergüencen; ¡que el fuego reservado para tus enemigos los destruya!

Jeremías 38:4

Los oficiales le dijeron al rey: “Este hombre merece morir porque está desmoralizando a los defensores que quedan en la ciudad, y también a todo el pueblo, al decirles esto. Este hombre no trata de ayudar a esta gente, sólo va a destruirla”.

Jeremías 43:3

¡No, es Baruc hijo de Nerías quien te ha puesto en contra de nosotros para entregarnos a los babilonios para que nos maten o nos exilien a Babilonia!”

Amós 7:10

Entonces Amasías, el sacerdote de Betel, envió un mensaje a Jeroboam, rey de Israel, diciendo: “Amós está conspirando contra ustedes en el pueblo de Israel. ¡Lo que dice es insoportable!

Números 14:2

Todos los israelitas fueron y se quejaron a Moisés y Aarón, diciéndoles: “¡Ojalá hubiéramos muerto en Egipto, o aquí en este desierto!

Mateo 5:11

Benditos ustedes cuando las personas los insulten y los persigan, y los acusen de todo tipo de males por mi causa.

Hechos 21:28

“¡Hombres de Israel, vengan a ayudarnos!” gritaron. “Este es el hombre que está enseñando por todas partes para que se opongan a nuestro pueblo, a la Ley y al Templo. Además ha traído griegos al Templo, contaminando este lugar santo”.

Hechos 5:28

“¿Acaso no les dimos orden de no enseñar en este nombre?” preguntó el Sumo Sacerdote, con tono exigente. “¡Miren, han saturado a toda Jerusalén con su enseñanza, y ahora ustedes tratan de culparnos por la muerte de él!”

1 Corintios 10:10

No se quejen de Dios, como algunos lo hicieron, y murieron en manos del ángel destructor.

2 Corintios 6:8

Nosotros seguimos, no importa si recibimos honra o deshonra, si somos maldecidos o alabados. La gente nos llama fraude, pero nosotros decimos la verdad.

Judas 1:16

Tales personas son gruñonas, que siempre están quejándose. Siguen sus propios deseos malos, y hablan con jactancia de sí mismos, y halagan a otros para lograr sus propios fines.