Jesús viajó por toda Galilea, enseñando en las sinagogas, contando las buena nueva del reino, y sanando todas las enfermedades que tenían las personas.
No tengo nada por lo cual jactarme en predicar la buena noticia, porque es algo que hago como deber. ¡De hecho, para mí es terrible si no comparto la buena noticia!
Que prediques la palabra de Dios, sea conveniente o no, y dile a las personas lo que están haciendo mal; dales consejo y ánimo. Y enséñales esto con mucha paciencia.
“Escribe esto al ángel de la iglesia de Sardis: Esto es lo que dice el que tiene los siete Espíritus de Dios y las siete estrellas: Yo sé lo que has logrado, y que tienes la apariencia de estar vivo, pero en realidad estás muerto.