En cierta ocasión se reunió una gran multitud que venía de muchas ciudades para verlo. Jesús les hablaba, usando relatos como ilustraciones.
Más tarde, ese día, Jesús se fue de la casa y se sentó a enseñar junto al lago.
“Un granjero salió a sembrar su semilla. Mientras la esparcía, algunas cayeron en el camino, donde las personas las pisaban y las aves se las comían.