Porque incluso sus propios hermanos no creían realmente en él.
Mientras Jesús hablaba a las multitudes, su madre y sus hermanos llegaron y lo esperaban fuera, y querían hablar con él.
Cuando la familia de Jesús escuchó acerca de esto, fueron a buscarlo para llevárselo, porque decían, “¡se ha vuelto loco!”
Después que sus hermanos se marcharon para ir a la fiesta, Jesús también fue, pero no abiertamente, sino que se mantuvo oculto.
sus hermanos le dijeron: “Debes marcharte a Judea para que tus seguidores puedan ver los milagros que puedes hacer.
Ninguno que quiera ser famoso mantiene ocultas las cosas que hace. Si puedes hacer tales milagros, ¡entonces muéstrate al mundo!”