Yo soy el pan de vida.
Benditos son aquellos cuyo mayor deseo es hacer lo justo, porque su deseo será saciado.
Entonces los judíos comenzaron a murmurar acerca de él porque había dicho “yo soy el pan que descendió del cielo”.
Yo soy el pan vivo que bajó del cielo, y cualquiera que coma de este pan, vivirá para siempre. Este pan es mi carne, la cual daré para que el mundo viva”.