Jesús estaba caminando en el Templo por el pórtico de Salomón. Los judíos lo rodearon y le preguntaron:
Era invierno y era la fecha de la Fiesta de la Dedicación en Jerusalén.
Entonces él se agarró fuertemente de Pedro y Juan mientras todos corrían por el Pórtico de Salomón en completo asombro por lo que había ocurrido.
Y se llevaban a cabo muchas señales milagrosas entre el pueblo a través de los apóstoles. Y todos los creyentes solían reunirse en el pórtico de Salomón.