Zela, Haelef, Jebús (o Jerusalén), Guibeá y Quiriat-Yearín, es decir, catorce ciudades con sus aldeas correspondientes. Esta fue la tierra asignada a la tribu de Benjamín, por familias.
La asignación de la tribu de Simeón fue parte de la que se le dio a la tribu de Judá, ya que lo que había recibido la tribu de Judá era demasiado grande para ellos.