Entonces Jonás oró al Señor su Dios desde el vientre del pez.
Podrás beber del arroyo, y he ordenado que los cuervos te lleven comida allí”.
Aunque me mate, esperaré en él. Todavía seguiré defendiendo mis caminos ante él.
y llámenme cuando estén en problemas. Los rescataré, y me agradecerán”.
Cuando clamen a mí pro ayuda, Responderé; cuando estén en problemas, Estaré con ellos. Los salvaré y los honraré.
Señor, cuando sufrimos acudimos a ti, derramando nuestras oraciones como susurros mientras nos disciplinabas.
Entonces me iré y volveré de donde vine, hasta que reconozcan sus faltas, y en su desesperación busquen mi rostro y supliquen mi ayuda”.
¿Está sufriendo alguno entre ustedes? Ore. ¿Hay alguien alegre entre ustedes también? Cante canciones de alabanza.