Jeremías 21:12

Versión Biblia Libre

Descendientes de David, esto es lo que dice el Señor: Asegúrense de juzgar con justicia cada día. Protejan a los que son tratados injustamente de esa gente corrupta, pues de lo contrario, a causa de sus malas acciones, mi ira arderá como un fuego que no se puede apagar.

Referencias Cruzadas

2 Samuel 8:15

David gobernó sobre todo Israel. Hizo lo que era justo y correcto para todo su pueblo.

Job 29:17

Rompí la mandíbula de los malvados y les hice soltar su presa de los dientes.

Salmos 101:8

Trabajo cada día para silenciar a los malvados de la tierra, para librar a la ciudad del Señor de todos los que hacen mal.

Éxodo 18:13

Al día siguiente Moisés se sentó como juez del pueblo, y le presentaron sus casos desde la mañana hasta la noche.

Isaías 1:17

Aprendan a hacer el bien; luchen por la justicia, condenen a los que oprimen a los demás; defiendan los derechos de los huérfanos, tomen medidas para defender a las viudas.

Isaías 1:31

Su pueblo fuerte se convertirá en ceniza, y su trabajo será como una chispa. Arderán juntos, y nadie podrá apagar las llamas.

Isaías 7:13

Entonces Isaías dijo: “¡Escuchen, familia real de Judá! ¿No les basta con desgastar a la gente? ¿Tienen que desgastar también a mi Dios?

Isaías 7:2

Cuando la familia real de Judá fue informada, “Aram y Efraín tienen una alianza”, Acaz y su pueblo se aterrorizaron y se estremecieron como árboles en el bosque sacudidos por el viento.

Jeremías 17:4

Tendrás que renunciar a la tierra que te di. Haré que tus enemigos te conviertan en sus esclavos en un país desconocido, porque has hecho arder mi ira, que arderá para siempre.

Jeremías 21:5

Yo mismo lucharé contra ti con todo mi poder y fuerza, con toda la fuerza de mi furiosa ira.

Jeremías 23:19

¡Cuidado! El Señor ha enviado una furiosa tormenta, un tornado que gira en torno a las cabezas de los malvados.

Jeremías 23:2

Esto es lo que el Señor, el Dios de Israel, dice de los pastores que debían cuidar a mi pueblo: Ustedes han dispersado mi rebaño. Los han ahuyentado y no los han cuidado, así que ahora me ocuparé de ustedes por todo el mal que han hecho, declara el Señor.

Jeremías 23:5

Mira, se acerca el momento, declara el Señor, en que elegiré a un descendiente de David que haga lo correcto. Como rey gobernará con sabiduría y hará lo que es justo y correcto en todo el país.

Jeremías 36:7

Tal vez vengan y pidan perdón al Señor, y todos ellos dejen de actuar con maldad, porque el Señor amenaza con una ira terrible contra ellos”.

Jeremías 4:4

Dedíquense al Señor; comprométanse totalmente con él, pueblo de Judá y Jerusalén. De lo contrario, mi ira arderá como el fuego, ardiendo con tanta fuerza que nadie podrá apagarla a causa del mal que has hecho.

Jeremías 44:22

El Señor no pudo soportarlo más -las cosas malas que hiciste y tus actos repugnantes-, así que tu país se convirtió en un páramo deshabitado, un lugar de horror y una palabra de maldición para los demás, como lo sigue siendo hoy.

Jeremías 5:14

Esta es la respuesta del Señor Dios Todopoderoso: Por lo que has dicho, haré que mis palabras sean como un fuego en tu boca y que tú seas como la leña que quema.

Jeremías 5:28

Han engordado y se han hecho expertos en el mal. Niegan la justicia a los huérfanos, y no defienden los derechos de los necesitados.

Jeremías 7:20

Esto es lo que dice el Señor: ¡Mira! Mi ira se derramará sobre este país, sobre las personas y los animales, sobre los huertos y las cosechas del campo. Arderá y nadie podrá apagarlo.

Jeremías 7:5

Si cambian con sinceridad su manera de actuar y hacen lo que es correcto, si se tratan con justicia unos a otros,

Lamentaciones 4:11

El Señor ha dado plena expresión a su ira. Ha derramado su furia. Ha encendido un fuego en Sión, y ha quemado hasta sus mismos cimientos.

Ezequiel 22:31

Así que les he hecho experimentar mi hostilidad, abrasándolos con el fuego de mi ira. Me he asegurado de que sufran las consecuencias de lo que han hecho, declara el Señor Dios”.

Levítico 26:28

entonces actuaré contra ustedes con furia, y yo mismo los castigaré siete veces por sus pecados.

Nahúm 1:6

¿Quién puede resistir su furia? ¿Quién puede soportar el ardor de su ira? Su enojo brota como fuego derretido y rompe las rocas en pedazos.

Sofonías 1:18

Su plata y su oro no los salvarán el día de la ira del Señor. Toda la tierra será consumida con el fuego del celo de su ira. Él se asegurará de que la destrucción de los habitantes del mundo sea repentina y completa.

Sofonías 3:5

Pero el Señor que hace justiciar aún está entre ustedes, y no hará mal. Cada mañana emite su juicio, y cada día sin falta. Pero los que actúan injustamente no tienen vergüenza.

Lucas 1:69

Nos ha dado un gran Salvador del linaje de su siervo David,

Romanos 13:4

Los que están en el poder son siervos de Dios, que han sido puestos allí para el propio bien de ustedes. De modo que si ustedes hacen mal, deben tener temor, ¡no en vano las autoridades tienen el poder para castigar! Ellos son siervos de Dios, que castigan a los infractores.

Deuteronomio 32:22

Mi ira se ha encendido, quemando hasta las profundidades de la tumba, destruyendo la tierra y todo lo que produce, incluso prendiendo fuego a los cimientos de las montañas.