Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas
- Anuncios -




Isaías 38:3

Versión Biblia Libre

“Por favor, recuerda Señor cómo te he seguido fielmente con todo mi corazón. He hecho lo que es bueno a tus ojos”. Entonces Ezequías gritó y lloró.

Ver Capítulo Copiar

40 Referencias Cruzadas  

Cuando Abrán tenía 99 años, el Señor se le apreció y le dijo: “Yo soy el Dios Altísimo. Vive en mi presencia y haz el bien.

Esta es la historia de Noé y su familia. Noé era un hombre íntegro, que vivía una vida con principios morales entre las personas de su época. Él tenía una relación estrecha con Dios.

Aunque los altares paganos no fueron removidos, Asá se comprometió completamente con el Señor durante toda su vida.

Silo haces, el Señor cumplirá la promesa que me hizo cuando dijo: ‘Si tus descendientes viven bien delante mí, con fidelidad y con total compromiso, siempre tendrás a uno de ellos en el trono de Israel’.

E hizo lo justo alos ojos del Señor, siguiendo todo lo que había hecho su antepasado David.

“Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre. Sírvele con total dedicación y con una mente dispuesta, porque el Señor examina cada motivación y entiende la intención de cada pensamiento. Si lo buscas, lo encontrarás; pero si lo abandonas, te rechazará para siempre.

Por favor, dale también a mi hijo Salomón el deseo de cumplir de todo corazón tus mandamientos, decretos y estatutos, y de hacer todo lo posible para construir tu Templo que yo he dispuesto”.

El pueblo celebró porque sus líderes habían estado tan dispuestos a dar al Señor, libremente y de todo corazón. El rey David también se alegró mucho.

Porque el Señor busca por toda la tierra la oportunidad de mostrar su poder a favor de los que le son total y sinceramente devotos. Tú has actuado de forma estúpida al hacer esto. Así que de ahora en adelante siempre estarás en guerra”.

E hizo lo que era correcto a los ojos del Señor, pero no con total compromiso.

Mientras Esdras oraba y confesaba sus pecados, llorando y cayendo de bruces ante el Templo de Dios, una gran multitud de israelitas, hombres, mujeres y niños, se reunió a su alrededor. El pueblo también lloraba amargamente.

Cuando me enteré de la noticia, me senté, llorando y lamentándome durante días, ayunando y orando al Dios del cielo.

Dios mío, por favor, acuérdate de mí por esto. Por favor, no olvides las buenas acciones que he hecho por el Templo de mi Dios y sus servicios.

Entonces les dije a los levitas que se purificaran y vinieran a vigilar las puertas para santificar el día de reposo. Dios mío, por favor, acuérdate también de mí por haber hecho esto, y sé misericordioso conmigo a causa de tu amor digno de confianza.

También dispuse que se suministrara madera para el altar en los tiempos especificados, y que se donara la primera parte de los productos. Dios mío, acuérdate de mí favorablemente.

Por favor, Dios mío, recuérdame positivamente por todo lo que he hecho por este pueblo.

Me aseguraré de que mi vida sea irreprochable. ¿Cuándo vendrás a ayudarme? Mi vida será íntegra, incluso en privado.

Las cenizas son mi comida; mis lágrimas gotean encima de mi bebida,

Que en mi inocencia pueda seguir tus normas sin ser avergonzado.

Siempre he mantenido al Señor delante a mí, y no seré zarandeado porque él está a mi lado.

Porque yo siempre recuerdo tu amor fiel, y sigo tu verdad.

Cuán felices son aquellos cuyos pecados el Señor no los tiene en cuenta, aquellos que no actúan de manera engañosa.

Mis gemidos me han consumido. Cada noche mi cama se inunda con mi llanto, y mi sillón rebosa con mis lágrimas.

Déjenme en paz, pueblo que hace el mal. Porque el Señor ha escuchado mi llanto.

Cuando Ezequías escuchó esto, fue a orar en privado al Señor, diciendo

Entonces el Señor envió un mensaje a Isaías, diciendo:

Peleó con un ángel y ganó. Lloró y le rogó por una bendición. Jacob encontró a Dios en Betel, y allí habló con él,

Cuando Jesús vio que Natanael se acercaba, dijo de él: “¡Miren, aquí hay un verdadero israelita! No hay ninguna falsedad en él”.

Nos enorgullecemos en el hecho—y nuestra conciencia lo confirma—de que hemos actuado de manera apropiada con las personas, especialmente con ustedes. Hemos seguido los principios de Dios de santidad y sinceridad, no conforme a la sabiduría mundanal, sino por la gracia de Dios.

Haz lo que es bueno y correcto ante los ojos del Señor para que te vaya bien y puedas entrar y apoderarte de la buena tierra que el Señor tu Dios prometió dar a tus antepasados,

Jesús, mientras estuvo aquí, en forma humana, oró y clamó a Dios con grandes gemidos y lágrimas, al único que tenía el poder de salvarlo de la muerte. Y Jesús fue escuchado por su respeto hacia Dios.

Dios no hubiera sido injusto como para olvidarse de lo que ustedes han hecho y del amor que le han demostrado mediante el cuidado que han brindado a los hermanos creyentes, lo cual es algo que todavía siguen haciendo.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos