Cuando el dueño de la casa se levante y cierre la puerta, ustedes estarán afuera tocando, y diciendo: ‘Señor, por favor, ábrenos la puerta’. Pero él les responderá: ‘No los conozco, ni sé de dónde vienen’.
Por la fe de ustedes en él, Dios los protegerá con su poder hasta que venga la salvación. La salvación que está lista para ser revelada en el último día.