Ester 8:3

Versión Biblia Libre

Ester fue a hablar de nuevo con el rey, cayendo a sus pies y llorando, suplicándole que acabara con el malvado plan de Amán el agagueo que había ideado para destruir a los judíos.

Referencias Cruzadas

2 Reyes 4:27

Pero cuando llegó hasta el hombre de Dios en la montaña, se agarró a sus pies. Giezi se acercó para apartarla, pero el hombre de Dios le dijo: “Déjala en paz, porque tiene una miseria terrible, pero el Señor me lo ha ocultado y no me lo ha explicado”.

Ester 3:1

Algún tiempo después de esto, el rey Jerjes honró a Amán, hijo de Hamedata, el agagueo, dándole un puesto más alto que el de todos sus compañeros.

Ester 7:4

Porque mi pueblo y yo hemos sido vendidos para ser destruidos, asesinados y aniquilados. Si sólo hubiéramos sido vendidos como esclavos, me habría callado, porque nuestro sufrimiento no habría justificado molestar al rey”.

Ester 8:2

El rey le quitó el anillo de sello que le había quitado a Amán y se lo dio a Mardoqueo. Ester puso a Mardoqueo a cargo de los bienes de Amán.

Ester 8:4

Una vez más, el rey le tendió a Ester el cetro de oro. Ella se levantó y se puso de pie ante él.

Isaías 38:2

Cuando Ezequías escuchó esto, fue a orar en privado al Señor, diciendo

Oseas 12:4

Peleó con un ángel y ganó. Lloró y le rogó por una bendición. Jacob encontró a Dios en Betel, y allí habló con él,

Hebreos 5:7

Jesús, mientras estuvo aquí, en forma humana, oró y clamó a Dios con grandes gemidos y lágrimas, al único que tenía el poder de salvarlo de la muerte. Y Jesús fue escuchado por su respeto hacia Dios.

1 Samuel 25:24

Cayendo a sus pies en señal de respeto, le dijo: “Señor, acepto toda la responsabilidad por lo que ha sucedido. Por favor, escuche lo que yo, su sierva, tengo que decir.