Cantares 1:5

Versión Biblia Libre

Soy negra, pero soy hermosa, mujeres de Jerusalén, como las tiendas de Cedar, como las cortinas de Salomón.

Referencias Cruzadas

Salmos 120:5

¡Ay de mí! Que soy extranjero en Meséc, que he acampado entre las tiendas de Cedar.

Salmos 149:4

Porque el Señor se alegra con su pueblo, y honra a los oprimidos con su salvación.

Salmos 45:9

Entre las mujeres nobles están las hijas del rey; la reina permanece detrás de ti en tu lado derecho, llevando joyería echa con oro refinado de Ofir.

Salmos 90:17

Que nuestro señor y Dios se complazca con nosotros, bendiciendo cada cosa que hagamos, bendiciendo cada cosa que hagamos.

Cantares 2:14

Mi paloma está fuera de la vista en las grietas de la roca, en los escondites del acantilado. Por favor, ¡déjame verte! ¡Deja que te escuche! ¡Porque hablas tan dulcemente, y te ves tan hermosa!

Cantares 2:7

Mujeres de Jerusalén, júrenme por las gacelas o los ciervos salvajes que no molestarán nuestro amor hasta el momento oportuno.

Cantares 3:10

Sus soportes estaban cubiertos de plata, y el respaldo estaba cubierto de oro. El cojín del asiento era de color púrpura. El interior estaba decorado con detalle.) ¡Mujeres de Jerusalén,

Cantares 3:5

Mujeres de Jerusalén, júrenme por las gacelas o los ciervos salvajes que no perturbarán nuestro amor hasta el momento oportuno.

Cantares 4:3

Tus labios son tan rojos como el hilo de escarlata. Tu boca es preciosa. Tus mejillas son del color del rubor de las granadas detrás de tu velo.

Cantares 5:16

Su boca es la más dulce de todas; ¡es absolutamente deseable! Este es mi amor, mi amigo, mujeres de Jerusalén.

Cantares 5:8

Mujeres de Jerusalén, prométanme que si encuentran a mi amor y no saben qué decirle, díganle que estoy débil de amor.

Cantares 6:4

Eres hermosa, querida, tan bonita como Tirzah, tan encantadora como Jerusalén. ¡Te ves asombrosa!

Cantares 8:4

Mujeres de Jerusalén, júrenme que no perturbarán nuestro amor hasta el momento oportuno.

Isaías 21:16

Esto es lo que me dijo el Señor: “Dentro de un año, igual que un trabajador contratado cuenta exactamente los años, toda la gloria de Cedar desaparecerá.

Isaías 53:2

Como un brote joven creció ante él, como una raíz que surge de la tierra seca. No tenía belleza ni gloria para que nos fijáramos en él; nada en su aspecto nos atraía.

Isaías 60:7

Todos los rebaños de Cedar serán traídos a ti, los carneros de Nebaiot serán puestos a tu disposición. Los aceptaré cuando sean sacrificados en mi altar, y glorificaré el Templo donde me honran.

Isaías 61:10

¡Yo celebraré felizmente en el Señor! Todo mi ser gritará alabanzas a mi Dios. Porque me ha vestido con ropas de salvación, y me ha envuelto en un manto de bondad. Soy como un novio vestido para la boda, como una novia que lleva sus joyas.

Ezequiel 16:14

Fuiste famosa en todo el mundo por tu belleza, porque usé mi poder majestuoso para hacerte tan maravillosa, declara el Señor Dios.

Ezequiel 27:21

Arabia y todos los jefes de Cedar comerciaron contigo, dándote a cambio corderos, carneros y cabras.

Mateo 10:25

ellos deben estar satisfechos con llegar a ser como su maestro, y los siervos como su amo. Si a quien es la cabeza del hogar le han llamado demonio Belcebú, ¡aún más llamarán demonios a los demás miembros de esta casa!

Mateo 22:11

“Pero cuando el rey llegó a ver a los invitados, se dio cuenta de que había un hombre que no tenía puesto el vestido adecuado para la boda.

Lucas 13:34

“¡Oh Jerusalén, Jerusalén, tú matas a los profetas y apedreas a los que se te envían! ¡Cuántas veces he querido reunir a todos tus hijos como la gallina reúne a sus polluelos bajo sus alas, pero tú no quisiste!

Lucas 15:22

“Pero el padre le dijo a sus siervos: ‘Rápido, traigan la mejor túnica y póngansela. Pónganle un anillo en su dedo y sandalias en sus pies.

Romanos 13:14

Por el contrario, vístanse del Señor Jesucristo y olvídense de seguir sus deseos pecaminosos.

2 Corintios 5:21

Dios hizo que Jesús, quien nunca pecó, experimentara las consecuencias del pecado para que nosotros pudiéramos tener un carácter recto, así como Dios es recto.

Gálatas 4:26

Pero la Jerusalén celestial es libre. Ella es nuestra madre.

Efesios 5:26

Él la santificó, la limpió al lavarse en el agua del mundo,

1 Juan 3:1

¡Miren el amor que tiene el Padre para con nosotros! Por eso podemos ser llamados hijos de Dios, ¡porque eso es lo que somos! La razón por la que el mundo no nos reconoce como hijos de Dios es porque no lo reconocen a él.