El que está sentado en el trono dijo: “¡Todas las cosas las estoy haciendo nuevas!” Y me dijo: “Escribe esto, porque estas palabras son fieles y verdaderas”.
Fíjense que lo que predije se ha hecho realidad, al igual que las cosas nuevas que les estoy diciendo ahora. Te digo lo que sucederá antes de que suceda”.
Y el ángel me dijo: “Escribe esto: ¡Cuán felices son los que están invitados a la fiesta de bodas del Cordero!” Entonces me dijo: “Estas son las verdaderas palabras de Dios”.
Si alguno quita las palabras proféticas de este libro, Dios le quitará su parte en el árbol de la vida y de la ciudad santa que se describe en este libro.
Entonces el ángel me dijo: “Estas palabras son fieles y verdaderas. El Señor Dios, que dio su Espíritu a los profetas, envió a su ángel para mostrar a sus siervos lo que está a punto de suceder”.