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Referencias Cruzadas
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2 Samuel 23:4

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es como la luz del sol de la mañana que sale en un amanecer sin nubes; como el brillo de las gotas de lluvia sobre la hierba nueva que crece de la tierra’.

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17 Referencias Cruzadas  

Tu pueblo te seguirá en el día en que tu poder sea revelado en las montañas santas, renovado en fuerza cada mañana como el rocío al amanecer.

Que su reino sea como la lluvia que cae sobre la hierba nueva, como el rocío que riega la tierra.

Su linaje real permanecerá para siempre, y su dinastía permanecerá ante mí tanto como el sol ha permanecido.

La vida de los que hacen el bien es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que su luz llega a plenitud del día.

Porque esto es lo que me ha dicho el Señor: Observaré en silencio desde donde vivo, tranquilo como la bruma de calor a la luz del sol, tranquilo como una nube de niebla en el calor de la cosecha.

Pero en ese momento, “el retoño del Señor” será atractivo y glorioso; el fruto que produzca la tierra será el orgullo y la gloria de los supervivientes que queden en Israel.

Levántate y brilla, porque ha llegado tu luz; la gloria del Señor se ha levantado sobre ti.

Las naciones acudirán a tu luz, y los reyes acudirán al resplandor de tu aurora.

Conozcamos al Señor; procuremos conocerlo y él se aparecerá frente a nosotros como el sol brillante. Él vendrá a nosotros tan ciertamente como la lluvia de la primavera que riega la tierra”.

Por eso los he reducido a través de los profetas y los destruí con mis palabras. Mi juicio resplandece como la luz.

Entonces los que quedan del pueblo de Jacob estarán en medio de muchas naciones, como rocío del Señor, como lluvias sobre el pasto, que no espera a nadie, y que nadie puede detener.

Pero para los que tienen reverencia por mi, el sol de la salvación de Dios brillará con curación en sus alas, y serán liberados, saltando como terneros que han sido liberados de sus establos.

Él vino como testigo para hablar acerca de la luz, a fin de que todos pudieran creer por medio de él.

Que mi enseñanza caiga suavemente como la lluvia; que mis palabras caigan ligeramente como el rocío, como una suave lluvia sobre la hierba nueva, como lluvias primaverales sobre las plantas en crecimiento.

¡Que todos tus enemigos mueran así, Señor! ¡Pero que los que te aman brillen como el sol en todo su esplendor! La tierra estuvo en paz por cuarenta años.




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