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Referencias Cruzadas
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1 Samuel 3:18

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Así que Samuel le contó todo y no le ocultó nada. “Es el Señor”, respondió Elí. “Que haga lo que le parezca bien”.

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18 Referencias Cruzadas  

¡No puedes hacer algo así! No puedes matar a las personas buenas junto con las malvadas, pues estarías tratando a buenos y malos del mismo modo. ¡No puedes actuar así! ¿No actuará con justicia el Juez de toda la tierra?”

Sé valiente y lucha lo mejor que puedas por nuestro pueblo y las ciudades de nuestro Dios. Que el Señor haga lo que considere bueno”.

Pero si dice: ‘No estoy conforme contigo’, aquí estoy. Que me haga lo que mejor le parezca”.

Entonces Ezequías le dijo a Isaías: “El mensaje del Señor que me has contado está bien”. Pues pensó: “Después de todo, habrá paz y seguridad durante mis años de vida”.

Sé valiente y lucha lo mejor que puedas por nuestro pueblo y las ciudades de nuestro Dios. Que el Señor haga lo que considere bueno”.

“Estaba desnudo cuando salí del vientre de mi madre, y estaré desnudo cuando me vaya”, dijo. “El Señor dio, y el Señor ha quitado. Que el nombre del Señor sea honrado”.

Pero él le dijo: “¡Hablas como lo haría cualquier mujer insensata! ¿Debemos recibir sólo el bien de Dios, y no el mal?” A pesar de todo esto, Job no dijo nada pecaminoso.

Me mantendré quieto, no diré ni una palabra, porque eres tú quien me ha hecho esto.

El Señor descendió en una nube, se puso de pie con él, y llamó el nombre “Yahvé”.

Ezequías dijo a Isaías: “El mensaje del Señor que me has dicho está bien”. Porque se dijo a sí mismo: “Definitivamente habrá paz y seguridad durante mi vida”.

El profeta Jeremías le dijo todo esto a Sedequías, rey de Judá, allí en Jerusalén.

Entonces el rey Sedequías mandó llamar al profeta Jeremías y se reunió con él en la tercera entrada del Templo. “Necesito pedirte algo”, le dijo el rey a Jeremías. “No debes ocultarme nada”.

“Haré lo que me pides”, respondió Jeremías. “Definitivamente, rezaré al Señor tu Dios como me has pedido, y te diré todo lo que él diga. No te ocultaré nada”.

¿Por qué habría de quejarse un ser humano de las consecuencias de sus pecados?

Moisés explicó a Aarón: “Esto es lo que el Señor estaba hablando cuando dijo: ‘Mostraré mi santidad a los que se acerquen a mí; revelaré mi gloria para que todos la vean’”. Pero Aarón no respondió.

Humíllense ante la mano poderosa de Dios, para que los exalte en su debido tiempo.

Los israelitas le dijeron al Señor: “¡Hemos pecado! Trátanos de la manera que creas conveniente, ¡sólo que por favor sálvanos ahora!”.




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