Saúl esperó allí siete días el tiempo que Samuel había dicho, pero Samuel no llegó a Gilgal, y el ejército comenzó a abandonarlo.
Amasa convocó al ejército de Judá, pero tardó más del tiempo que le habían dado.
Luego ve delante de mí a Gilgal. Te aseguro que iré y me reuniré contigo para presentar holocaustos y ofrendas de paz. Espera allí siete días hasta que yo vaya a verte y te haga saber lo que debes hacer”.