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Referencias Cruzadas
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1 Corintios 8:6

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Pero para nosotros solo hay un Dios, el Padre, a partir del cual fueron hechas todas las cosas, y él es el propósito de nuestra existencia; y un Señor, Jesús, por medio de quien todas las cosas fueron hechas, y él es el mediador de nuestra existencia.

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40 Referencias Cruzadas  

Recuerden lo que he hecho por ustedes desde el principio, porque yo soy Dios, y no hay Dios fuera de mí. Yo soy Dios, y no hay ninguno como yo.

¡No hay nadie como tú, Señor! ¡Eres tan grande! ¡Eres increíblemente poderoso!

Todo el mundo debería respetarte, Rey de las naciones. Así es como deben tratarte. No hay nadie como tú entre todos los sabios de todas las naciones y reinos.

“Soy hebreo”, respondió Jonás. “Y yo adoro al Señor, al Dios de los cielos, del mar y de la tierra”.

¿Acaso no tenemos todos un mismo Padre? ¿No nos creó a todos el mismo Dios? ¿Por qué, entonces, somos desleales unos con otros, violando el acuerdo que hicieron nuestros antiguos padres?

El Padre lo ha confiado todo en mis manos, y ninguno entiende verdaderamente al Hijo, excepto el Padre, y nadie entiende verdaderamente al Padre, excepto el Hijo, y aquellos a quienes el Hijo elige para mostrarles al Padre.

Jesús vino donde ellos estaban y les dijo: “Se me ha entregado todo el poder del cielo y de la tierra.

Él estuvo en el mundo, y aunque el mundo fue hecho por medio de él, el mundo no supo quién era él.

Todo llegó a existir por medio de él; y sin él nada llegó a existir.

Yo y el Padre somos uno”.

“Ustedes me llaman ‘Maestro’ y ‘Señor,’ y está bien que lo hagan, pues eso es lo que soy.

Ese día ustedes sabrán que yo vivo en el Padre, que ustedes viven en mí, y que yo vivo en ustedes.

La vida eterna es esta: conocerte, a ti que eres el único Dios verdadero, y a Jesucristo a quien enviaste.

“Suéltame”, le dijo Jesús, “porque aún no he ascendido a mi Padre; más bien ve donde mis hermanos y diles que voy a ascender a mi Padre, y Padre de ustedes, mi Dios y el Dios de ustedes”.

En él vivimos, nos movemos y existimos. Tal como escribieron los mismos poetas de entre ustedes: ‘Somos su familia’.

Ahora esté todo Israel convencido de esto: ¡Dios ha puesto a este Jesús, a quien ustedes mataron en una cruz, como Señor y Mesías!”

Dios lo exaltó a una posición de honor, a su diestra, como Príncipe y Salvador, como una forma de traer arrepentimiento a Israel, y para perdón de pecados.

Todo proviene de él, todo existe por medio de él, y todo es para él. ¡Gloria a Dios para siempre, amén!

Es enviada a la iglesia de Dios en Corinto, a aquellos que han sido justificados en Cristo Jesús, llamados para vivir en santidad, y a todos los que adoran al Señor Jesús en todas partes, el Señor de ellos y de nosotros.

Permítanme ser claro con ustedes: ninguno que habla en el Espíritu de Dios dice: “¡Maldigan a Jesús!” y ninguno puede decir: “¡Jesús es el Señor!” excepto por el Espíritu Santo.

“La comida es para el estómago y el estómago es para la comida”, pero Dios destruirá a ambos. Además, el cuerpo no debe ser usado para la inmoralidad, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo.

De modo que en cuanto a comer los alimentos sacrificados a ídolos: sabemos que no existe tal cosa como los ídolos en el mundo, y que hay solo un Dios verdadero.

Alabado sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien nos ha bendecido en Cristo con todo lo que es espiritualmente bueno en el mundo celestial,

Por eso me arrodillo ante el Padre

Se les mostró todo esto para que tuvieran la certeza de que el Señor es Dios y no hay nadie como él.

Así que hoy tengan la certeza de esto y no lo olviden nunca: el Señor es el único Dios arriba en el cielo y abajo en la tierra.

Escucha, pueblo de Israel, el Señor nuestro Dios, el Señor es el único.

que vino a ustedes, así como a todo el mundo, esparciéndose ampliamente y dando resultados. Del mismo modo ha dado resultados en ustedes, desde que lo oyeron y comprendieron la naturaleza de la gracia de Dios.

Por medio de él, ustedes creen en Dios, quien lo levantó de los muertos, y lo glorificó, para que ustedes puedan confiar y tener esperanza en Dios.

Soy el que vive. Estuve muerto, pero mírame, ahora estoy vivo por siempre y para siempre, y tengo las llaves de la muerte y del sepulcro.




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