Contestóles él: 'No me retengáis, ya que Yahveh ha hecho prosperar mi camino; dejadme partir para que yo vuelva a mi se or'.
1 Corintios 9:12 - Biblia Castilian 2003 Si otros ejercen sobre vosotros este derecho, ¿con cuánta más razón nosotros? Sin embargo, no hemos usado de este derecho, sino que lo sobrellevamos todo para no poner tropiezo alguno al evangelio de Cristo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Si otros participan de este derecho sobre vosotros, ¿cuánto más nosotros? Pero no hemos usado de este derecho, sino que lo soportamos todo, por no poner ningún obstáculo al evangelio de Cristo. Biblia Nueva Traducción Viviente Si ustedes sostienen a otros que les predican, ¿no deberíamos tener nosotros aún mayor derecho a que nos sostengan? Pero nunca nos hemos valido de ese derecho. Preferiríamos soportar cualquier cosa antes que ser un obstáculo a la Buena Noticia acerca de Cristo. Biblia Católica (Latinoamericana) Si otros compartieron lo que ustedes tenían, con mayor razón lo podíamos hacer nosotros, pero no hicimos uso de este derecho y lo soportamos todo para no crear obstáculos al Evangelio de Cristo. La Biblia Textual 3a Edicion Si otros participan de este derecho sobre vosotros,° ¿cuánto más nosotros? Pero no hacemos uso de este derecho, sino que lo soportamos todo, para no poner ningún obstáculo al evangelio del Mesías. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si otros ejercen sobre vosotros este derecho, ¿con cuánta más razón nosotros? Sin embargo, no hemos usado de este derecho, sino que lo sobrellevamos todo para no poner tropiezo alguno al evangelio de Cristo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Si otros participan de este derecho sobre vosotros, ¿por qué no nosotros? Pero no hemos usado de este derecho; antes todo lo sufrimos, por no poner ningún obstáculo al evangelio de Cristo. |
Contestóles él: 'No me retengáis, ya que Yahveh ha hecho prosperar mi camino; dejadme partir para que yo vuelva a mi se or'.
Hice un reconocimiento y dije a los principales, a los consejeros y al resto del pueblo: '¡No los temáis! Acordaos del Se or grande y terrible, y pelead por vuestros hermanos, por vuestros hijos y vuestras hijas, por vuestras mujeres y vuestras casas'.
¡Ay de vosotros, doctores de la ley, porque os habéis llevado la llave del saber! Vosotros no entrasteis, y a los que estaban para entrar se lo impedisteis'.
y, como eran de la misma profesión, viv a con ellos y juntos trabajaban. Eran fabricantes de tiendas de campa a.
Por eso precisamente me he visto impedido tantas veces de llegar hasta vosotros.
De entrada, ya es un menoscabo para vosotros que tengáis pleitos en vuestra comunidad. ¿No ser a mejor sufrir la injusticia? ¿No ser a mejor que os dejarais despojar?
De la misma manera, el Se or dispuso que quienes anuncian el evangelio, del evangelio vivan.
Pero yo no he usado ninguno de estos derechos. Y no lo escribo para reclamar estas cosas. Antes prefiero morir que... ¡Nadie me privará de esta gloria!
Pues anunciar el evangelio no es para m motivo de gloria; es un deber que me incumbre. ¡Y ay de m, si no anuncio el evangelio!
¿Cuál es entonces mi paga? Que al anunciar el evangelio, lo anuncie gratis, sin usar del derecho que por el evangelio me corresponde.
Si para los otros no soy apóstol, a lo menos para vosotros lo soy, pues el sello de mi apostolado sois vosotros en el Se or.
Y lo que he hecho hasta ahora lo seguiré haciendo, para cortarles todo apoyo a los que buscan ocasión de ser tenidos iguales a nosotros en aquello de que se jactan.
Porque toleráis que os tiranicen, os devoren, os exploten, os traten con altivez, os abofeteen.
Cuando llegué a Tróade para anunciar el evangelio de Cristo, aunque se me abrió una puerta en el Se or,
No damos en nada motivo de tropiezo a nadie, para que no sea censurado este ministerio nuestro.