Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Apocalipsis 2:11 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

11 El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El vencedor no sufrirá daño alguno de la segunda muerte. El mensaje a Pérgamo

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

11 El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de la segunda muerte.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

11 »Todo el que tenga oídos para oír debe escuchar al Espíritu y entender lo que él dice a las iglesias. Los que salgan vencedores no sufrirán daño de la segunda muerte.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

11 El que tenga oídos, escuche este mensaje del Espíritu a las Iglesias: 'El vencedor no tiene nada que temer de la segunda muerte.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

11 El que tiene oído, oiga qué dice el Espíritu a las iglesias. El que venza, no sufrirá daño de la muerte segunda.°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

11 Quien tenga oídos, oiga lo que dice el Espíritu a las Iglesias. El que venza, no sufrirá daño de la muerte segunda'.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

11 El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere no recibirá daño de la muerte segunda.

Féach an chaibidil Cóip




Apocalipsis 2:11
16 Tagairtí Cros  

El que tenga oídos, que oiga.


Jesús concluyó su explicación diciendo: – El que tenga oídos para escuchar, que escuche.


Y otras semillas cayeron en buena tierra, crecieron y produjeron frutos al ciento por ciento. Jesús añadió: – El que tenga oídos para oír, que oiga.


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré del maná escondido y le daré también una piedrecita blanca en la que está escrito un nombre nuevo que solo conoce quien la recibe.


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré a comer del árbol de la vida que está en el paraíso de Dios.


La muerte y el hades fueron lanzados al lago de fuego, que es la segunda muerte.


Plenamente felices y santos los que participan en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene poder sobre estos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con Él mil años.


El vencedor, heredará todas estas cosas y Yo seré su Dios y él será mi hijo.


Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables, los asesinos, los que cometen inmoralidades sexuales, los hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos recibirán como herencia el lago de fuego y azufre; que es la segunda muerte”.


Al vencedor, lo haré columna del templo de mi Dios y ya no saldrá de allí; escribiré en él el nombre de mi Dios y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la que baja del cielo de parte de mi Dios; también grabaré en él mi nuevo nombre.


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.


Al vencedor, se le vestirá de blanco. Jamás borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre y delante de sus ángeles.


El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí