Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





1 Juan 3:24 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

24 El que guarda los mandamientos de Dios, permanece en Él y a través del Espíritu Santo que Él nos dio, podremos tener intimidad con Él y saber que Dios permanece en nosotros.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

24 Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

24 Los que obedecen los mandamientos de Dios permanecen en comunión con él, y él permanece en comunión con ellos. Y sabemos que él vive en nosotros, porque el Espíritu que nos dio vive en nosotros.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

24 El que guarda sus mandamientos permanece en Dios y Dios en él. Pues Dios permanece en nosotros, y lo sabemos por el Espíritu que nos ha dado.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

24 Y aquél que guarda sus mandamientos, permanece en Él, y Él en aquél; y en esto sabemos que Él permanece en nosotros: por el Espíritu que nos dio.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

24 El que guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto conocemos que permanece en nosotros: por el Espíritu que nos ha dado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

24 Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Él, y Él en él. Y en esto sabemos que Él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.

Féach an chaibidil Cóip




1 Juan 3:24
21 Tagairtí Cros  

pero si hago las obras de mi Padre, aunque no crean en lo que yo digo, por lo menos crean en las obras, para que las conozcan íntimamente, ya que ellas hacen referencia a mi Padre y por fin conocerán que el Padre está en mí y yo en el Padre.


Y Él es el Espíritu de la verdad, ya que el mundo no lo puede recibir, porque no lo ve, ni lo conoce íntimamente; pero ustedes lo conocen íntimamente porque permanece en ustedes y estará en el interior de cada uno de ustedes.


Para que todos sean uno, como Tú y yo somos uno, y que también ellos fundamenten su unidad en nosotros, para que el mundo crea que Tú me enviaste.


¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios vive en ustedes?


¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo y que el Espíritu Santo habita en ustedes? Entonces, ustedes no son dueños de su cuerpo,


¿Qué comunión hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque nosotros somos templo del Dios viviente. Como Él ha dicho: “Viviré en ellos y caminaré con ellos. Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo”.


Por lo tanto, el que no hace caso a estas enseñanzas no está negándose a obedecer a seres humanos, más bien está rechazando a Dios, ya que Él nos da su Espíritu Santo en nuestro interior.


Guarda esta enseñanza de salvación por medio del Espíritu Santo que vive en nosotros.


Mi deseo es que permanezca constantemente en ustedes lo que escucharon con mucha atención desde el principio y así siempre permanecerán tanto en el Hijo como en el Padre.


Y en esto sabemos que lo hemos conocido íntimamente, si guardamos sus mandamientos.


Pero el que guarda la Palabra, que es Jesucristo, en este verdaderamente el amor sacrificial de Dios se ha perfeccionado y cumplido, por eso conocemos íntimamente que estamos en Él y existimos por Él.


El que dice que permanece en Jesucristo, siempre debe andar como anduvo Él.


Y todo cuanto pidamos, lo recibiremos de parte de Dios según nuestras necesidades, pues guardamos sus mandamientos y delante de Él practicamos lo correcto.


Amados míos, amémonos los unos a los otros con el amor sacrificial de Dios en Cristo Jesús, porque el amor viene de Dios, todo el que ama ha sido engendrado por Dios y lo conoce íntimamente.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí